Afiliados de Eusko Alkartasuna críticos con la actual Dirección de Eba Blanco han calificado de "insostenible" la situación interna que padece la formación y han denunciado que se intente "silenciar voces" como la de Maiorga Ramírez.

Alrededor de un centenar de afiliados han trasladado este sábado en Bilbao su apoyo a Maiorga Ramírez, candidato a la Secretaría General de la formación, así como a los coordinadores Iratxe López de Aberasturi, Miren Aranoa, Mikel Goenaga y Esther Korres, a quienes se les ha abierto expedientes disciplinarios de expulsión.

El acto ha contado además con la presencia del exlehendakari y fundador de la formación, Carlos Garaikoetxea, y con la intervención de la exconsejera del Gobierno Vasco, Esther Larrañaga, y del coordinador de EA en Bilbao, Bruno Zubizarreta, quien ha calificado de "antidemocrática" la situación que padece Eusko Alkartasuna, formación integrada en EH Bildu.

Por su parte, quien fuera exconsejera de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Gobierno Vasco Esther Larrañaga ha leído un comunicado en el que lamentado la "escalada de despropósitos antidemocráticos" que, a su juicio, se están dando en Eusko Alkartasuna.

Según ha subrayado, pese a que el reto de la formación pasa por seguir siendo "un partido capaz de influir estratégicamente en el futuro", la situación interna es "insostenible y dura demasiado tiempo".

"Eusko Alkartasuna no ha sido capaz de encauzar democráticamente el debate político de fondo y, para evitarlo, se han incumplido las normas de las que nos hemos dotado, como han determinado los tribunales", ha incidido.

Tras reclamar que se repita el proceso de primarias, ha denunciado que la actual Dirección tampoco aceptase la celebración de un Congreso extraordinario y la única respuesta haya sido por contra abrir expedientes disciplinarios de expulsión.

"Este burdo intento de silenciar voces no acaba ahí y se produce un intento de expulsión de miembros de la comisión de garantías. Es inaudito que una Dirección interina arremeta incluso contra el órgano que vela por los derechos de la afiliación", ha criticado.

En este contexto, ha reiterado la necesidad de que se permita votar a los afiliados para "decidir el rumbo" de Eusko Alkartasuna tras dos años de interinidad. "Debemos elegir ya en primarias quién dirigirá el rumbo del partido sin trampa ni cartón; un afiliado, un voto", ha reclamado.

POSICIÓN EN EH BILDU

Además, ha advertido que quien obtenga el apoyo de la militancia deberá abrir "inmediatamente" un proceso de diálogo y sentar las bases para realizar un Congreso "transparente y con garantías". "El debate político es nuestro gran reto. O ser una fuerza política activa en la coalición o diluirnos en EH Bildu; éste es realmente el debate", ha remarcado.

Para ello, ha ofrecido la "mano tendida" del sector crítico para establecer un diálogo que lleve a pactar "normas de democracia interna y transparencia" que permitan afianzar el proyecto "abertzale y socialdemócrata de EA". "Este es el único camino a la solución", ha concluido.