La Policía destaca la "relación directa" entre la supuesta operación de espionaje a Luis Bárcenas, conocida como Kitchen, y la investigación sobre la presunta caja B del PP, "tanto desde el punto de vista temporal" como en cuanto "al sujeto" en torno al que giran los hechos: el extesorero del Partido Popular.
Por esa razón la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía ha solicitado al juez de la Audiencia Nacional que investiga esa presunta "contabilidad extracontable" del PP que pida al juzgado de ese mismo tribunal que instruye el caso Kitchen una serie de documentación que obra en esta causa tras haberse levantado el secreto hace unos meses.
Precisamente, lo que se investiga en la pieza Kitchen, incluida en el caso Villarejo, es la presunta operación de espionaje "desplegada" por el Ministerio del Interior entre 2013 y 2015 para espiar al extesorero del PP y a su familia en busca de documentos relacionados con esa contabilidad que éste reflejaba en lo que después se vino a llamar "los papeles de Bárcenas" con el objetivo de evitar que llegasen al juez.
En su informe, la Policía ve una conexión temporal entre el espionaje y la investigación a la presunta caja B dado que "su planteamiento, ejecución y finalización son coincidentes", y también "en cuanto al sujeto".
El informe destaca, en base a informaciones publicadas tras el levantamiento del secreto de sumario, la "materialización del éxito de la operación"en el sentido de la consecución del objetivo de obtención de documentación" e información de carácter privado de Luis Bárcenas vinculada a la investigación de la contabilidad del partido.
Por eso, la UDEF quiere contar con las declaraciones de varios investigados, incluido el antiguo chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, que fue supuestamente captado como confidente policial para la operación; así como la información que salió de dos teléfonos del extesorero que éste le dio al excomisario Enrique García Castaño, también investigado.
También las actas notariales de los mensajes que el exsecretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez dice haberse intercambiado con el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz sobre esta operación y que éste niega. Ambos están imputados.
Quiere conocer a su vez los mensajes que se intercambió Martínez con García Castaño, en los que el segundo le informaba en 2015 que Bárcenas ocultaba patrimonio en Cracovia y las Antillas Holandesas, u otro donde reconocía que podría sacar el "pendrive" del extesorero; así como documentos intervenidos en los registros de los domicilios del exsecertario de Estado y de Ríos, en concreto, un disco duro con información sobre el operativo.
Recuerda la UDEF que tanto García Castaño como Villarejo reconocieron esta supuesta operación de espionaje, y el primero especificó que tanto el exnúmero dos de la Policía Eugenio Pino como Francisco Martínez le señalaron un tipo de documentación con información sobre la financiación y contabilidad del PP "conteniendo las donaciones que se daban y los pagos que hacía en A y en B".
Indica que, según el juez del caso, "al menos una parte de la documentación que se buscaba se habría finalmente localizado" y que eso se hizo al margen de la UDEF, que es quien investiga la presunta caja B.