El presidente del PP, Pablo Casado, ha desvinculado a la actual dirección de su partido del caso Kitchen, en el que se investiga el espionaje al extesorero de esta formación Luis Bárcenas, y ha apelado a la presunción de inocencia de la ex secretaria general del PP Dolores de Cospedal y el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, después de que la Fiscalía Anticorrupción haya solicitado su imputación.
En un encuentro con el periódico "El Mundo", el presidente del PP se ha desvinculado de la investigación del espionaje a Luis Bárcenas y ha señalado que en 2012 y 2013 él era un diputado por Ávila y "no tenía responsabilidad en el partido".
Casado ha dicho que "hay que reafirmar la presunción de inocencia", pues el PP ya ha asistido a investigaciones que finalmente han quedado "en nada", como la de "los famosos ordenadores". y ha destacado su compromiso con la "honorabilidad" y la "ejemplaridad".