Iriarte se ofrece para liderar la “transición” hacia un “cambio de rumbo” y superar la crisis

A Iriarte le tocó abrir el debate por ser la candidata con menos apoyos. Lo hizo presentando sus credenciales como candidata a lehendakari y ofreciéndose como la alternativa eficaz al Gobierno de coalición PNV-PSE. La candidata de EH Bildu vertebró su discurso en torno a la situación generada por la pandemia del coronavirus y sus devastadoras consecuencias sanitarias, sociales y económicas y buscó marcar las diferencias sobre las políticas del Ejecutivo de Iñigo Urkullu.

Iriarte se extendió durante una hora y cuarto dedicado en exclusiva a desmontar a Urkullu y su coalición con el PSE, dando por agotado su gobierno antes siquiera de escuchar el programa planteado por el otro candidato. En su discurso se ofreció en varias ocasiones a “liderar la transición para un cambio de rumbo” en Euskadi en estos tiempos de pandemia, dejando en evidencia la verdadera intención de la presentación de una candidatura que no tenía opciones para salir adelante: presentarse como referencia del cambio.

Tras reprochar al actual Ejecutivo de Urkullu los errores e incapacidades en la gestión de la pandemia en materia de salud pública, prestación de servicios sociales, educación, gestión económica y del empleo, Iriarte apostó por reforzar la cartera de servicios públicos en todas estas áreas. Además reclamó un nuevo modelo económico, dando por agotado el vigente, vinculándolo a la economía verde; planteó un acuerdo nacional por el empleo de calidad y se comprometió a impulsar un salario mínimo de 1.200 euros; y prometió 10.000 empleos públicos verdes y otros 20.000 mediante iniciativas privadas.

En materia fiscal, recuperó sus propuestas de la campaña electoral pasada apostando por la tasa covid para aumentar los ingresos públicos, así como un gravamen para las grandes fortunas y la subida del impuesto de sociedades y los tipos altos del IRPF. También solicitó una renta universal de 120 euros para los jóvenes menores de 23 años. En materia de pensiones, prometió poner en marcha un sistema público vasco e implantar una prestación mínima de 1.080 euros.

Iriarte considera imprescindible que Euskadi tenga “instrumentos para decidir” de cara a afrontar la crisis generada por la pandemia. En este sentido señaló que el virus ha puesto de manifiesto que tenemos un autogobierno “de quita y pon”. Considera que el Estatuto de Gernika, que todavía no ha sido completado, “no es suficiente para hacer frente con garantías a los retos actuales”.

Asimismo, denunció que la crisis del coronavirus ha evidenciado que Euskadi tiene un autogobierno “de quita y pon”, por lo que reafirmó su apuesta por la independencia y planteó que el Parlamento Vasco cuente con una propuesta de nuevo estatuto político para 2022, la cual pueda ser sometida a consulta.

Tras reafirmar el compromiso de EH Bildu con la consecución de la soberanía y la independencia de Euskadi. Iriarte, en referencia a los 58 escaños que suman el PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos sobre un total de 75, destacó que el 77% de los parlamentarios de la Cámara autonómica son partidarios, “al menos de palabra”, del derecho a decidir. Por ello propuso utilizar esta mayoría para avanzar hacia una relación “de igual a igual” entre Euskadi y España, basada en un sistema “confederal” y con garantías que impidan la vulneración “unilateral” de las condiciones acordadas por el Estado español.

En la parte final de su discurso, reclamó el acercamiento de los presos de ETA a cárceles vascas y pidió respeto para todas las víctimas, también las de la guerra sucia del Estado y de la violencia policial.

“La crisis del coronavirus ha evidenciado que tenemos un autogobierno de quita y pon”

Candidata lehendakari por EH Bildu