pamplona - El enrevesado proceso interno que vive Eusko Alkartasuna (EA) para elegir al sucesor de Pello Urizar se enturbió ayer un poco más si cabe. Esta vez fue la Comisión de Organización Electoral (COE) la que dio otra vuelta de tuerca al anular la candidatura del dirigente de EA en Navarra y parlamentario de EH Bildu, Maiorga Ramirez, a secretario general del partido en las primarias que iban a celebrarse el viernes 25 de octubre.
Ramirez, según informó el propio afectado, había presentado 400 avales para convertirse en candidato. Ocho veces más que los 50 exigidos, “conseguidos entre afiliados en apenas 48 horas y cumpliendo todos los requisitos”, pese a que se le negó hasta en dos ocasiones el censo de la escasa militancia de Iparralde.
Para dificultar más las cosas, la COE, afín al sector oficial del partido, exigió que al menos cinco de los avales fueran de cada uno de los territorios (Navarra, Álava, Gipuzkoa, Bizkaia e Iparralde), pese a que esta condición fue retirada a primeros de octubre por la Comisión de Garantías del partido.
Pesea a que siete de los 400 avales presentados por Ramirez fueron recogidos en Iparralde, el COE le invalidó ayer cinco y le deja fuera de la carrera por el liderazgo de la formación abertzale. Por el contrario, Eva Blanco, que solo reunió 60 avales, queda como única candidata y virtual próxima secretaria general de EA, a la espera de los recursos que presente Ramirez.
De momento, el parlamentario foral ha anunciado que en primera instancia denunciará lo sucedido ante la Comisión de Garantías y la de Organización Electoral.
“Esta situación es un auténtico escándalo y una cacicada que no persigue sino sustraer el derecho de participación de la afiliación de EA”, señaló Ramirez.
Agregó que “al nombrar automáticamente a Eva Blanco secretaria general del partido se ha apartado del proceso de elección a mas de 400 militantes”, y alertó de que Blanco “deberá gestionar una situación absolutamente irregular, puesto que ha conseguido seis veces menos avales”. - J. Encinas