Bilbao - Han tenido que transcurrir casi once años para que el concejal del PSE Isaías Carrasco, asesinado por ETA en marzo de 2008, haya sido objeto de un homenaje unitario en el Ayuntamiento de Arrasate. El Consistorio, tradicional feudo de la izquierda abertzale, saldó así una “deuda pendiente” ante la mujer y los tres hijos del edil socialista, que ayer estuvieron presentes en un acto de recuerdo al que se sumaron todas las fuerzas políticas presentes en la administración local, junto a reprsentantes de diferentes partidos vascos.
Con el recuerdo a Carrasco, que fue concejal de 2003 a 2007, Arrasate ha emprendido un “calendario” de “reparación de todas las víctimas” y por “la convivencia del municipio”, un “camino” consensuado por todos los partidos de ese Ayuntamiento (PNV, PSE-EE, EH Bildu, Baleike e Irabazi) a través de la Mesa de la Memoria y la Convivencia, puesta en marcha en septiembre de 2016. En todo caso, la alcaldesa Maria Ubarretxena (PNV), exigió disculpas “por no haber estado a la altura de las circunstancias” en aquellos tiempos, a la par que emplazó a los presentes a construir la convivencia en Euskadi. “Queremos avanzar en una memoria compartida, pero sin equiparar a las víctimas”, remarcó la primera edil arrasatearra ante una nutrida representación política.
Poco antes, fue Sandra Carrasco -hija del edil asesinado por ETA- quien tomó la palabra para agradecer el tributo y animar a contruir un futuro en paz con la memoria como principal instrumento. Posteriormente descubrieron una placa en recuerdo de Carrasco en el salón de plenos. Carrasco llamó a superar “el dolor y la rabia” que puede embargar a las víctimas del terrorismo para continuar “dando pasos hacia adelante. Porque esos sentimientos solo nos hacen daño”, incidió.
Con una nutrida representación del PSE encabezada por su secretario general del partido en Gipuzkoa, Eneko Andueza; el consejero de Medio Ambiente, Iñaki Arriola, y el diputado foral de Cultura, Denis Itxaso, al acto también asistieron el delegado del Gobierno en el País Vasco, Jesús Loza; la directora del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, Gogora, Aintzane Ezenarro, y la coordinadora general de Ezker Ani-tza-IU, Isabel Salud,.
Quien también asistió fue el portavoz de la Diputación guipuzcoana, Imanol Lasa, quien esaltó que “este sentido homenaje a Isaías Carrasco debería haberse realizado hace mucho tiempo”. “Era una deuda pendiente que teníamos con él, con su familia y con todos sus amigos. Nuestro pueblo ha sufrido momentos realmente dolorosos que no pueden volver a repetirse. Es necesario que mantengamos todo este sufrimiento vivido en el recuerdo, conservarlo en la memoria”, abundó.
Ha dicho que hoy se ha dado “un gran paso” y que es preciso “cubrir los años de silencio y cobardía con sentimientos, valores y con una apuesta decidido por la convivencia”. “Las víctimas reclaman verdad, justicia y reparación y es nuestro deber ofrecérselo. El pueblo de Arrasate ha liquidado hoy una gran deuda”, subrayó.
El homenaje a Carrasco llega después de que Arrasate pusiera en marcha en septiembre de 2016 la mesa de Memoria y Convivencia “como paso necesario en la reconstrucción de la convivencia” en la localidad. Tras meses de “intenso diálogo”, ha sido posible alcanzar “los consensos de base necesarios para construir una memoria compartida”. Así, próximamente se reconocerán a la víctima del Batallón Vasco Español en 1975 Iñaki Etxabe y German Aguirre, asesinado de tres disparos el mismo año y cuyo asesinato no fue reivindicado. - DNA