madrid ? El titular de Justicia, Rafael Catalá, aseguró ayer que se están produciendo pintadas, atentados contra el patrimonio y hasta cortes de suministro eléctrico en domicilios de jueces y fiscales en Catalunya. El ministro hizo estas afirmaciones en su respuesta en el pleno del Congreso a una interpelación del parlamentario del PDeCAT Jordi Xuclá, quien le emplazó a pedir perdón por el uso de “las porras” en la jornada del referéndum del pasado 1 de octubre.
Para el ministro, quienes deben pedir perdón son aquellos que alimentan “la confrontación social y el conflicto” y quienes parece que no quieren vivir en libertad y democracia, sino que viven “cómodamente en una sociedad que amenaza, coacciona y limita los derechos de los discrepantes”. “No conozco a ningún constitucionalista que haya ido a amenazar, a coaccionar o a pintar la fachada de ningún independentista. Y sí a muchos independentistas que han hecho escraches a los jueces, pintadas en los comercios y en las viviendas y cortado los suministros de energía a servidores públicos como jueces y fiscales”, enfatizó. Fuentes del Ministerio precisaron que esos ataques se suceden con pintadas en las puertas o fachadas de los domicilios aunque las víctimas no lo hagan público.
Por ejemplo, unos desconocidos entraron el fin de semana en la segunda residencia que la fiscal jefa de Barcelona, Anna Maria Magaldi, tiene en un pueblo del Pirineo y le cortaron la calefacción y le desconectaron la antena de televisión, tras forzar el trastero donde se encuentra la caldera de la vivienda. El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, Jesús María Barrientos, reveló que varios jueces destinados en Catalunya reclamaron su traslado por la “situación de tensión personal” desencadenada por el procés.
Xuclá interpeló al ministro sobre la crisis del sistema de Justicia en el Estado español y, en concreto, sobre la aplicación del artículo 155. A su juicio, no había base legal para cesar al Govern ni disolver el Parlament y, con esas medidas, el Gobierno derogó de forma unilateral el Estatut. El ministro argumentó que las medidas del 155 se aplicaron de forma “prudente, proporcionada, razonable y adecuada a la gravedad de la situación”. Catalá defendió que jueces y fiscales “han estado a la altura” en el proceso, al contrario que quienes les han intentado coaccionar, amedrentar o quienes hicieron que la noche del 20 de septiembre una secretaria judicial tuviera que salir de la Consellería de Economía por la azotea. ? Efe