bilbao - El lehendakari ha hecho una apuesta segura para reemplazar a Juan Mari Aburto al frente de la consejería de Empleo y Políticas Sociales. Aburto, que dejará el departamento el martes para centrarse en ganar la alcaldía de Bilbao en las elecciones municipales y forales de mayo, activó el pasado año la mesa de diálogo social con la patronal y los sindicatos CCOO y UGT y, aunque de momento no ha servido para pactar nuevos convenios o condiciones salariales para los trabajadores dada la ausencia de los sindicatos mayoritarios ELA y LAB, sí está siendo útil para acordar actuaciones para impulsar el empleo de los jóvenes y otros colectivos vulnerables, entre otras materias. En un momento en que el diálogo social seguirá siendo un reto clave para el departamento, con miles de trabajadores que siguen sin renovar sus convenios y en un contexto en que los sindicatos abertzales y sobre todo ELA optan por la máxima confrontación, Urkullu se ha decantado por Ángel Toña Guenaga, profesor de la Universidad de Deusto muy experimentado en la mediación laboral.
Toña, que lleva ejerciendo como conciliador en el Consejo de Relaciones Laborales desde 1990, trabajó para desbloquear el convenio del Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia en 2004, una negociación muy tensa marcada por la huelga de subcontratas, y donde el nuevo consejero propuso subidas salariales para tratar de acercarse a las peticiones de los sindicatos. Asimismo, tomó parte en el conflicto de las ambulancias de Bizkaia registrado el año pasado, un episodio también de máxima intensidad donde, tras casi 40 días de huelga, la patronal, los trabajadores y los sindicatos CCOO, UGT y LAB aceptaron la propuesta de Toña, que entre otras cuestiones blindaba la ultraactividad: el convenio no caducaría, sino que las condiciones recogidas en documento seguirían vigentes hasta suscribir otro nuevo.
experiencia en gobiernos Fuentes consultadas aseguran que Toña es la primera opción que barajó el lehendakari para el puesto, que ambos son viejos conocidos, y que Urkullu se decantó por él porque goza de prestigio entre los trabajadores, los sindicatos y las empresas. Ha buscado un profesional con un currículum estrechamente ligado a la labor que le tocará desempeñar, con experiencia sobre empleo y mediación a nivel académico y en la práctica, y que además conoce desde dentro la Administración pública y las negociaciones políticas, ya que ha ocupado altos cargos dentro de la consejería de Empleo en los años ochenta y noventa. Unos años en los que se registraron, además, elevadas tasas de paro e importantes conflictos laborales.
Al margen de que sea una figura reconocida y con cierto prestigio dentro del ámbito laboral, Toña puede presentarse con el halo que le confiere ser independiente, no afiliado al PNV -es el tercer cargo del Gobierno vasco que reúne esa característica-. Engrosó las filas de Euskadiko Ezkerra a finales de los ochenta y principios de los noventa y, de hecho, fue viceconsejero de Trabajo entre febrero y octubre de 1991, con el lehendakari Ardanza, bajo las órdenes directas del consejero de EE Martín Auzmendi. Ya antes, entre abril y diciembre de 1980, había sido director de Empleo.
Quienes lo conocen destacan su faceta social y su compromiso con la banca ética y cívica, y podría aplicar esos conocimientos e intereses a sus retos inmediatos: el diálogo social entre patronal y sindicatos, y desplegar la cartera de servicios sociales pactada entre el Gobierno vasco, las diputaciones y los ayuntamientos. Ese decreto entrará en vigor a finales de este año, aunque exigirá coordinación entre instituciones para activar las prestaciones públicas, y para garantizar la financiación de esos servicios, que pasarán a ser un derecho de los ciudadanos y podrán exigirse ante los tribunales. Toña es profesor en la Universidad de Deusto desde 1978, y ahora imparte precisamente Ética Cívica y Profesional, y Ética de la Empresa en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. También imparte un máster en Recursos Humanos, y es profesor de Conflictividad Laboral. Tiene un doctorado en Ciencias Económicas y Empresariales, y centró su tesis en la información a los trabajadores en las empresas. Fue decano en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología y director de investigaciones sociales. Por otro lado, ha sido administrador judicial es diversos procedimientos concursales desde 2001. Toña también tiene algo de polifacético, ya que ha realizado alguna incursión dentro del mundo editorial deportivo, aunque no con vocación empresarial sino por afición y por saciar una de sus inquietudes: fundó Dorleta S.A., editora de revistas de ciclismo operativa hasta 1997.
toma de posesión Toña protagonizará su primera aparición pública como consejero el martes, cuando tomará posesión de su cargo y participará en el Consejo de Gobierno. El sustituto de Aburto tendrá que reorganizar y acometer varios retoques en el departamento, que quedará un tanto descabezado por las elecciones municipales y forales. En ese sentido, Aburto se llevará consigo a sus dos hombres de confianza, los viceconsejeros Iñigo Pombo y Ricardo Barkala; mientras el director de gabinete y comunicación, Imanol Zuluaga, optará a la alcaldía de Güeñes, y María Ubarretxena, directora de Economía Social, se postulará por Arrasate. Fuentes de Lakua consultadas por este periódico aseguran que el nuevo consejero será el encargado de decidir los tiempos para traer a los sustitutos, y dará forma así, como es natural, a su propio círculo de confianza. Las bajas en el departamento, asimismo, permitieron descartar que el sustituto de Aburto procediera de la propia consejería, como adelantó ayer este periódico. El lehendakari llevó las gestiones desde la máxima discreción para evitar cualquier tipo de filtración a los medios de comunicación, aunque ya había contactado con Toña a finales del pasado año para cerrar su incorporación a Lakua.
Uno de los retos que afrontará el nuevo consejero pasará por tratar de atraer al máximo número de agentes al diálogo social, ya sea para desbloquear la negociación de las condiciones laborales y los salarios de miles de trabajadores vascos -algo imposible sin la presencia de ELA o LAB-, o para pactar actuaciones en materia de empleo y reactivación de la economía.
ELA ha optado por la confrontación, sin ninguna concesión al Gobierno vasco, al que acusa de aplicar los recortes de Mariano Rajoy y políticas neoliberales. Por ello, no ha considerado siquiera la posibilidad de participar en el diálogo social. LAB, sin embargo, partió de posiciones más flexibles pero ha endurecido su postura en los últimos meses. La mejoría de las condiciones económicas, que permitirá hablar de subidas salariales -algo que ya hacen la patronal y los sindicatos estatales-, y el final de las elecciones sindicales en las empresas podrían abrir nuevos horizontes.
Relaciones laborales. Ángel Toña ejerce como mediador en el Consejo de Relaciones Laborales desde 1990, y ha participado en tensas negociaciones como la del Consorcio de Aguas de 2004 o el convenio de las ambulancias de Bizkaia del pasado año. Ambas negociaciones estuvieron marcadas por huelgas de los trabajadores antes del acuerdo.
Política. Es independiente, aunque fue de Euskadiko Ezkerra a finales de los ochenta y principios de los noventa. No es un novato en la Administración pública: fue viceconsejero de Trabajo entre febrero y octubre de 1991, con el lehendakari Ardanza, bajo las órdenes directas del consejero de EE Martín Auzmendi; y entre abril y diciembre de 1980 había sido director de Empleo.
Formación. Es profesor en la Universidad de Deusto desde 1978, y ahora imparte Ética Cívica y Profesional, y Ética de la Empresa en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. También imparte un máster en Recursos Humanos, y es profesor de Conflictividad Laboral. Tiene un doctorado en Ciencias Económicas y Empresariales, y centró su tesis en la información a los trabajadores en las empresas.