Vitoria. La polémica del Centro Memorial sigue coleando a escasas jornadas de que el Gobierno Vasco se cite con el Ejecutivo español. Los departamentos de Seguridad e Interior se reunirán esta semana para departir sobre la coordinación entre las fuerzas estatales y la Er-tzaintza, pero también para allanar de alguna manera el camino a un encuentro entre Madrid y Lehendakaritza, que es el departamento que gestiona los planes de paz. En ese contexto, y cuando el lehendakari se propone rebajar la tensión y reconducir las relaciones con lealtad, el Gobierno español pretende aprobar su propuesta en septiembre y ser él quien gestione el Centro.
La propuesta, pactada durante el mandato de Patxi López y concebida como un plan compartido entre la CAV y Madrid, se ha situado en el ojo de la polémica después de que el Gobierno español entendiera que el Plan de Paz de Urkullu apuesta por que el Centro sea coordinado por el Instituto de la Memoria de Lakua, lo que no solo supondría que el Estado quedara relegado a un segundo plano, sino que el Centro, pensado para las víctimas de ETA, fuera coordinado por un Instituto que contempla a otros damnificados. Aunque Lakua ya ha dejado claro que no pretende amarrar la gestión del Centro, que conoce perfectamente los términos del pacto sellado con López, y que apuesta por la colaboración, fuentes populares insistieron ayer a Europa Press que el proyecto partirá de la base de que el control estará en manos del Estado, y no se cederá al Gobierno Vasco. De hecho, Madrid quiere tener perfilado el proyecto para el próximo mes de septiembre con el objetivo de que se incluya ya una partida presupuestaria para iniciar su funcionamiento en las Cuentas de 2014.
No obstante, Madrid no parece cerrar la puerta al acuerdo. Según las mismas fuentes, la previsión pasa por mantenerse en contacto con Lakua para clarificar su postura al respecto y, en cualquier caso, tener listo el proyecto para septiembre de este año. El Gobierno español propone que en el Centro estén representadas todas las comunidades, ya que ETA ha cometido atentados en todo el Estado; y que tenga un fin pedagógico y de creación de contenidos educativos para que sirvan a las futuras generaciones.