vitoria. "Si asumimos el techo y compartimos el campo de juego, este Gobierno está abierto a todo". Apenas unos minutos después de que Laura Mintegi diera por concluida con su valoración la ronda de contactos establecida por el lehendakari como antesala, entre otros aspectos, de la negociación presupuestaria, el portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka, avanzó la única condición que será innegociable para el Gabinete Urkullu en este escenario: recortar 1.200 millones de euros con respecto a los Presupuestos del pasado año.
Desde este punto de partida, Erkoreka presentó un escenario a medio plazo que poco o nada tiene que ver con la situación actual de miles de familias en Euskadi, hasta el punto de que el portavoz gubernamental aseguró que el consenso entre las fuerzas políticas y el trabajo común derivará en un plazo máximo de 18 meses en la creación de nuevos empleos.
Para que esta previsión se empiece a cumplir, el Gobierno Vasco intensificará en las próximas semanas el trabajo de cocina con el objetivo de que derive en la consecución de un acuerdo presupuestario que todavía está muy verde, a tenor de lo que ayer se escuchó en Lehendakaritza por parte de los líderes de EH Bildu y PSE. No obstante, Erkoreka destacó que en ambos casos había una "concordancia elevada" con respecto al Gobierno Vasco en otorgar un "carácter prioritario" a la Educación y la Sanidad.
Así las cosas, el Gabinete Urkullu tiene ante sí un panorama en el que deberá decidir qué partidas de estas dos áreas son susceptibles de desaparecer en las Cuentas de este año para contribuir a la rebaja de 1.200 millones que "obliga" la situación actual, según señaló ayer el propio Erkoreka. Este parece ser el nudo gordiano en esta temprana etapa negociadora de cara a culminar un acuerdo presupuestario y donde el Gobierno Vasco está dispuesto a escuchar todas las propuestas que la oposición plantee para evitar que el núcleo fundamental de los servicios que prestan estos departamentos se vea afectado por la rebajar económica.
En un intento por desbrozar la senda de escollos, Erkoreka no ocultó que el rechazo al recálculo de las previsiones de ingresos para aliviar las necesidades del Gobierno Vasco respondió al deseo de "posponer un acuerdo parcial para conseguir un acuerdo total" con otras fuerzas.
Así, el portavoz del Gabinete Urkullu confió en que esta decisión que partía de una propuesta de la Diputación de Bizkaia "dé sus frutos" a partir de ahora en la búsqueda de acuerdos.