DONOSTIA. Ni "apología del héroe", ni "condena del asesino". El documental Barrura begiratzeko leihoak (Ventanas al interior) pretende "salirse" de los discursos imperantes a la hora de abordar la cuestión de los reos vascos, entre ellos los de ETA, contribuyendo a acabar con el maximalismo "todo es ETA": "Queremos plantear el tema en parámetros humanos, intentar dar a conocer las vivencias, sentimientos, contradicciones, miedos, esperanzas... de esos presos. Porque, por mucho que le pese a algunos, también son personas".

Esa es, al menos, la posición que sostuvo ayer Josu Martínez, coordinador del proyecto, en los micrófonos de Radio Euskadi. El director salió a la palestra para defender públicamente el filme, que gira en torno a cinco reos vascos -en prisión por su militancia en ETA o por sumarios como Segi, Egin o Egunkaria- y que se ha visto en medio de una agria polémica durante los últimos días.

La riña comenzó en el Consistorio de Donostia, después de que los grupos constitucionalistas denunciaran que el Gobierno municipal, encabezado por el alcalde Juan Karlos Izagirre (Bildu), ha decidido subvencionar con 9.000 euros el filme -el primer edil trasladó ayer a la oposición que no tiene intención de echarse atrás-. La discusión fue subiendo de tono, y alcanzó su cenit anteayer: el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, insinuó que la ayuda a la película podría dar pie a la ilegalización de la propia Bildu.

"Que yo sepa, nadie ha visto la película, entre otras cosas porque ni siquiera está acabada -se estrenaría en el Zinemaldia-", replicaba Martínez al ser preguntado por la controversia, subrayando que los impulsores del proyecto son gente del mundo de la cultura, "y no queremos salirnos de ahí". Los 9.000 euros, añadió, podrían suponer "menos del 9%" del presupuesto total. El coordinador del documental también criticó al PSE de Donostia, el primer partido en airear la cuestión, por no preocuparse "ni siquiera" de preguntar sobre qué trata el filme. Asimismo, afirmó que han intentado reunirse tanto con los socialistas como con los populares donostiarras, "para explicarles cuáles son nuestras intenciones", pero que "nos han ignorado totalmente".

GOBIERNO ESPAÑOL Y PP

A vueltas con la ilegalización

Pero el debate seguía ayer vivo. En Madrid, Fernández Díaz volvió a la carga con su idea de ilegalizar a Bildu: "Hemos puesto el casillero a cero tras la sentencia de Sortu -que incluye un decálogo de exigencias a cumplir bajo amenaza de ilegalización-, pero vamos rellenando casillas y el Ayuntamiento de San Sebastián ya tiene la casilla muy cubierta, lo que eventualmente puede acercarles a un proceso de ilegalización".

Desde la franquicia popular en la CAV, su secretario general, Iñaki Oyarzábal, redujo la polémica a una "anécdota", aunque opinó que, tras la legalización de Sortu, el Gobierno español ha dado un "aviso" a Bildu y Amaiur. Mientras, el PSE, por boca de su portavoz, José Antonio Pastor, pidió a Izagirre que reconsidere la subvención y, al Ejecutivo español, "prudencia" a la hora de hablar de ilegalizaciones. "Ridículo", clamaron, por su parte, desde Amaiur.