nueva york. Francia, Reino Unido y Colombia anunciaron ayer al resto de miembros del Consejo de Seguridad de la ONU que se abstendrán en el caso de que se produzca una votación sobre el ingreso de Palestina al organismo internacional. Fuentes diplomáticas de la ONU confirmaron que durante la reunión mantenida ayer por el comité de nuevas adhesiones del Consejo de Seguridad, las delegaciones de esos tres países habían informado al resto de su abstención en la votación sobre la petición palestina.
Rusia, China, Sudáfrica, Brasil, India y Líbano comunicaron al resto de miembros que votarán a favor, y Estados Unidos confirmó que lo hará en contra (ejerciendo su derecho a veto), mientras que otros países, como Portugal, Alemania, Gabón, Nigeria y Bosnia no transmitieron todavía su decisión, según las mismas fuentes.
Con la amenaza del veto estadounidense, la petición de ingreso de los palestinos no saldrá adelante, aunque para que Estados Unidos se vea forzado al veto, Palestina necesita contar al menos con nueve respaldos en el Consejo, algo que está todavía en el aire tras conocerse los planes para abstenerse de esos tres países.
La reunión de ayer del comité de adhesiones sirvió para que los miembros del Consejo de Seguridad expusieran su postura sobre el ingreso de Palestina y para acordar el formato del informe que ese órgano debe remitir a la Asamblea General sobre si el Estado aspirante cumple con los requisitos para unirse a la ONU.
la solución, el día 11 Fuentes diplomáticas señalaron que el comité tendrá listo ese informe el próximo día 8, aunque no llegará al seno del Consejo de Seguridad hasta el próximo viernes 11, cuando sus miembros deben acordar si remiten sus conclusiones a la Asamblea General. Los quince acordaron, según esas fuentes, que el texto recoja los países a favor y en contra del ingreso de Palestina y quienes se abstendrán en una eventual votación, pero sin mencionar a los países en concreto.
Antes del comienzo de la reunión del comité de nuevas adhesiones a la ONU, el representante palestino ante la ONU, Riyad Mansour, compareció ante la prensa para explicar que su delegación sigue en contacto con los quince miembros del Consejo de Seguridad "muy intensamente" sobre el asunto de su petición. "Nuestro deseo es recibir la recomendación del Consejo de Seguridad", explicó Mansour, quien reconoció que "la realidad" es que su petición se encontrará con el veto de "un miembro muy potente" del Consejo, en referencia a Estados Unidos, por lo que entonces se explorarán "las opciones que tengamos disponibles". "Una vez que el proceso acabe dentro del Consejo de Seguridad, exploraremos todas las opciones, incluida la de acudir a la Asamblea General", aseguró, el diplomático para se les reconozca como Estado no miembro del organismo. Mansour también pidió ayer que el Consejo de Seguridad actúe contra las "represalias" iniciadas por Israel tras la aceptación de Palestina dentro del seno de la Unesco.
Aseguró que los palestinos quieren que el máximo órgano internacional de seguridad reaccione preferiblemente mediante una resolución a la construcción de nuevos asentamientos anunciada por Israel esta semana y a su amenaza de retener ingresos por impuestos pertenecientes a la Autoridad Nacional de Palestina (ANP). "Si no se detienen esas acciones, habrá una mayor escalada y la situación es muy volátil en la región", dijo ante la prensa el diplomático, que aseguró que "la Unesco no debería ser castigada" por aceptar a los palestinos en su seno.
"no atendieron a las llamadas" El Ejército israelí abordó ayer los dos navíos que se dirigían hacia Gaza para romper el bloqueo de Israel, después de que hicieran caso omiso de las peticiones de cambiar su rumbo, informó el Ejército en un comunicado. El contacto con los pasajeros a bordo (unas 27 personas de nueve países) ha sido bloqueado con los barcos, por lo que se desconoce su versión sobre cómo se ha desarrollado el asalto. "Hace un momento, soldados de la Marina (israelí) han abordado los barcos que se dirigían a la franja de Gaza tratando de romper el bloqueo marítimo de seguridad implantado de acuerdo al Derecho Internacional", señalaba una nota del Ejército.
Los barcos serán trasladados al puerto de Ashdod, ciudad israelí al norte de Gaza. Los militares "actuaron como estaba previsto y tomaron las precauciones necesarias para asegurar la seguridad de los activistas a bordo, así como la suya propia", agrega. "El abordaje fue efectuado en línea con las directivas del Gobierno israelí y después de todo intento, sin éxito, de impedir que los barcos alcanzasen la franja de Gaza", subraya el Ejército, que efectuó "numerosos llamamientos" y "en distintos puntos del mar" para que se desviasen a Ashdod o a territorio egipcio.
Según el relato de pasajeros y un periodista de Al Jazeera, los militares preguntaron al capitán de la nave canadiense Tahrir cuál era su destino, a lo que éste respondió: "La mejora de la humanidad" y "el fin de la ocupación de Gaza". Los activistas habían izado las banderas palestinas en sus embarcaciones, la canadiense Tahrir y la irlandesa Saoirse. Los pasajeros eran principalmente de Canadá, EEUU, Australia e Irlanda.
Los dos barcos habían partido de Turquía en secreto para evitar las presiones a Grecia que caracterizaron el último intento de una flotilla de llegar a las costas de Gaza.
