BILBAO. La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, ha reclamado "altura de miras" ante la actual "oportunidad histórica" y ha defendido que es "imprescindible partir todos del compromiso de darle la palabra al pueblo y respetar lo que decida". Asimismo, ha advertido de que "una parte sigue sin moverse" y, por tanto, el Estado tiene "deberes que hacer" para "restituir los derechos democráticos que ha ido conculcando".

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, la dirigente de LAB ha explicado que su sindicato no tiene "ni fecha ni invitación" para reunirse con el lehendakari, Patxi López, dentro de la ronda de encuentros que ha impulsado tras el anuncio de cese de la actividad armada por parte de ETA, aunque ha añadido que espera que les convoque porque los sindicatos "ni debemos ni podemos ser excluidos".

Tras insistir en que "es la época del diálogo" y "somos todos los que tenemos que dialogar", ha señalado que trasladará a López que, "en estos momentos, se ha generado una oportunidad histórica para de verdad dar una solución democrática al conflicto político que ha vivido Euskal Herria" y que "es responsabilidad de todos abordar la fase desde esa altura de miras".

Etxaide ha considerado que "es imprescindible un compromiso como punto de partida" de que "la decisión de lo que va a ser Euskal Herria en el futuro" tiene que depender "única y exclusivamente de lo que la sociedad vasca decide". "Tenemos que partir todos del compromiso de que vamos a darle la palabra al pueblo y vamos a respetar lo que la sociedad decida", ha reclamado.

Aunque ha opinado que las instituciones tienen que "jugar un papel importante", ha asegurado pero, en este momento, "es la hora de generar, articular y hacer el diálogo político sin exclusiones, donde todos tengamos la posibilidad de participar en igualdad de condiciones todas las fuerzas políticas".

La secretaria general de LAB ha lamentado que hay "un sector político que quiere evitar a toda costa que se genere el debate que tiene que dar soluciones definitivas y, por tanto, abordar los problemas políticos que tiene este país que se han intentado ocultar".

Según ha censurado, "se quiere mantener posiciones inmovilistas, que en estos momentos no son posibles", en cuestiones como "la teoría de la no suficiencia" del paso dado por ETA que, a su entender, "está superada porque la ha superado la sociedad".

En esta línea, ha manifestado que todavía es necesario "abordar la cuestión de que la superación definitiva de décadas de confrontación armada, de todo el sufrimiento que se ha generado en estas décadas y en todas las partes, se tiene todavía que superar" y, en su opinión, "sólo unos acuerdos en ese sentido que posibiliten la convivencia real y la reconciliación de la sociedad será la que supere definitivamente este ciclo".

Tras reclamar que "para llegar a esa fase se tienen que asumir compromisos por parte de todos", ha indicado que ve "lógico" que "ahora todos miramos al Estado y a las decisiones y los pasos que dé el Estado para de verdad consolidar definitivamente esta situación", porque "se ha abierto una nueva era, pero si de verdad se van a superar todos los obstáculos y se van a construir los acuerdos definitivos que necesita este país, será desde la implicación y de los pasos que tienen que dar todas las partes".

De este modo, ha censurado que "una parte sigue sin moverse y tiene deberes que hacer, como es restituir parte de los derechos democráticos que se han ido conculcando en los últimos años". En este sentido, ha reivindicado "la legalización de todas las opciones políticas, el cese de los ataques y juicios políticos y el respeto de los derechos fundamentales de los presos".

Etxaide ha explicado que, tras el anuncio de ETA, no ha podido hablar con el ex secretario general de LAB Rafa Díez Usabiaga, que se encuentra en prisión, aunque conocen que está viviendo este momento "desde el optimismo, desde el nerviosismo que supone no poder hablar con nadie, totalmente aislado" y ha añadido que están "totalmente convencidos de que este camino es una buena opción, que hemos generado una oportunidad histórica y que todos, y el sindicato en particular, va a saber actuar a la altura de las circunstancias".

UNIDAD SINDICAL

En relación a la posibilidad de que la nueva situación política facilite las relaciones entre los sindicatos en Euskadi, ha opinado que "hay pocas excusas" para no "trabajar conjuntamente entre todos", si bien ha precisado que "la división en Euskal Herria no se da por el conflicto político, se da porque existen dos modelos sindicales, dos estrategias, que entienden de forma muy diferente como se pueden defender los intereses de la clase trabajadora".

De este modo, ha insistido en que "lo determinante" para el trabajo conjunto de los sindicatos es el modelo sindical y ha insistido en que "hay un modelo sindical que ha decidido situarse al lado de los gobiernos y hay otro que ha decidido que las políticas que están desarrollando los gobiernos son las primeras que deben ser transformadas".