La ley catalana de consultas ha abierto una nueva crisis en el Tribunal Constitucional (TC). Los dos proyectos de sentencia discutidos hasta ahora han sido rechazados, y el ponente de la resolución, el magistrado conservador Javier Delgado, ha presentado su renuncia para seguir llevando el asunto. La norma fue recurrida por el Gobierno y quedó en suspenso en febrero pasado. Unos meses más tarde, en junio, se levantó la suspensión con el propósito de que el fallo sobre el fondo del asunto se diera a conocer poco después. Sin embargo, el TC ha fracasado en los intentos de acordar una sentencia. El ponente de la resolución, Javier Delgado, ha presentado su renuncia y no va a elaborar nuevos borradores. El debate ha quedado aplazado hasta el próximo mes de septiembre, y el TC deberá nombrar a un nuevo ponente para que plantee otra propuesta de sentencia.