vitoria. La directora de Atención a las Víctimas del Terrorismo, Maixabel Lasa, y el director adjunto de este organismo, Txema Urkijo, explicaron ayer en el Parlamento, a petición de Aralar, las razones por las que la Ertzaintza retiró el pasado 19 de junio las placas que homenajeaban en Azkoitia a tres miembros de ETA, uno de ellos, Ramón Oñederra, asesinado por el GAL.
Según la presidenta de la ponencia de seguimiento a la situación de las víctimas, la popular Mari Mar Blanco, Lasa explicó que la placa vulneraba el artículo 4 de la Ley de Reconocimiento y Reparación de 2008 al suponer una "humillación" para las víctimas. En su petición de comparecencia, Aralar señalaba que la Er-tzaintza había violentado ese mismo artículo al retirar la inscripción, colocada en el jardín contiguo a la parroquia de Azkoitia. Oñederra, miembro de ETA y a la vez víctima del terrorismo, fue incluido antes de la retirada de la placa en un monolito que recuerda en la localidad guipuzcoana a todos los afectados por el terrorismo.
Ayer estaba prevista también la comparecencia del presidente del consejo de Participación de Víctimas, José Luis de la Cuesta, pero no asistió al no haberle sido notificada la cita por un error burocrático.