vitoria. Ni el mejor guionista hubiera escrito un mejor guión para Iñigo Urkullu. El presidente del PNV llegará mañana al Alderdi Eguna con uno de los mejores trofeos posibles (la transferencia de las políticas activas de empleo) para el día más especial de la familia jeltzale. El burukide paseaba ayer por las campas de Foronda feliz por el logro, pero con la mirada puesta en la negociación presupuestaria.

El Alderdi Eguna de mañana llega en un momento dulce para su partido, con el traspaso de políticas activas bajo el brazo.

Sería mejorable si gozaramos de la responsabilidad de gobierno y fuéramos nosotros quienes gestionemos la transferencia. Se trata de una materia de autogobierno muy importante y eso nos hace estar orgullosos, con humildad pero orgullosos de poder decir que hoy Euskadi es más que Euskadi que ayer.

¿A esto se refería cuando dijo aquello de el PNV va a gobernar desde la oposición?

Así lo dije tras el desalojo que sufrimos por parte de PSE y PP que no habían ganado las elecciones autonómicas. A nosotros se nos ha ido acusando de hacer una oposición frontal al Gobierno vasco obviando la responsabilidad que como partido mayoritario tenemos en la sociedad vasca. En ese contexto dije que nuestra oposición iba a ser constructiva, de control al gobierno pero constructiva. En ese sentido, ejercemos un gobierno desde la oposición, efectivamente, y ahora se ha visto.

¿Se hubiera podido arrancar la transferencia si Zapatero no hubiera estado tan debilitado?

Las circunstancias que se nos han presentado no se han dado otras veces. Las oportunidades hay que aprovecharlas. De todas formas, el PNV siempre ha mantenido la misma posición en ésta y en otras circunstancias del pasado. Tenemos la sospecha de que los gobiernos vasco y español habían cerrado un preacuerdo con una interpretación de la transferencia totalmente diferente a lo que ha sido la reivindicación histórica del PNV y del Parlamento Vasco, es decir, que planteaban ejecutar la transferencia de manera devaluada, mercancía averiada.

López mostró su satisfacción por el traspaso y lo tildó de una buena noticia. Sin embargo, en un primer momento defendió a capa y espada un traspaso valorado en 300 millones frente a los 480 tasados por el PNV.

Se ha erigido en portavoz del Gobierno español de manera injusta, en vez de actuar como lehendakari de los vascos al defender con la firmeza que lo ha hecho la caja única de la Seguridad Social. Me ha dolido mucho la acusación de Patxi López de que el PNV debe a los parados de este país un año de gestión de las políticas activas y que nuestra demanda rompía la caja única de la Seguridad Social.

¿Ha apreciado un cambio en su posición respecto a este tema?

El viraje ha sido evidente. Ha intentado darle la vuelta al calcetín aplaudiendo que el PNV volviera a la senda estatutaria. Esta acusación no se sostiene ya que nosotros hemos sido fieles a la letra y el espíritu del Estatuto de Gernika, una reivindicación que hemos mantenido en los últimos 23 años.

¿Ha estado la negociación al borde la ruptura? O dicho de otro modo: ¿ha estado cerca el adelanto electoral?

Momentos de posible ruptura no los ha habido, porque en el mes de agosto hubo un debate muy intenso en las conversaciones con el Gobierno español y el PSOE, un debate que venía precedido de un plantemiento muy rotundo por mi parte al presidente del Gobierno español en los meses de abril, mayo y junio. No ha habido peligro de ruptura porque hasta septiembre no ha habido negociación propiamente dicha, pero sí ha habido un trabajo para generar en el seno del PSOE la gravedad de la situación a la que estaba abocado.

Algunos medios han publicado que Rodríguez Zapatero tiene asegurados los Presupuestos.

Me siguen sorprendiendo algunos medios cuando dicen que el PSOE ha comprado al PNV por 472 millones de euros, a pesar de que hemos dicho una y otra vez que la transferencia de las políticas activas de empleo es una precondición para sentarse a negociar las cuentas de 2011. La negociación no está asegurada, se lo aseguro.

¿Qué precio va a poner el PNV a su apoyo a los Presupuestos?

Vamos a basar nuestro apoyo a las cuentas en tres pilares: la situación económica, la situación política y la situación de mayoría social. En el debate del estado de la nación presentamos propuestas de resolución en las que se incluían transferencias pendientes que afectan al ámbito socioeconómico y laboral. En estas vamos a poner el énfasis en la negociación de las cuentas. Por otra parte, el diseño de los propios presupuestos debe estar basado en la austeridad, en la racionalidad del gasto público, sin perjuicio de una apuesta por proyectos de inversión.

En lo político, ¿cuáles van a ser sus principales demandas?

No podemos desaprovechar lo que queda de legislatura en el ámbito de la normalización política para un modelo de cierre del Estatuto de Gernika y para alcanzar un acuerdo en la profundización del autogobierno y también en materia de pacificación.

¿Pondrán sobre la mesa la derogación de la Ley de Partidos?

Ni siquiera Batasuna tiene sobre la mesa la Ley de Partidos. Hay que recordar que hay una sentencia del Tribunal de Estrasburgo que ratifica la ilegalización de Batasuna. En reiteradas ocasiones desde el PNV nos hemos pronunciado sobre la necesidad de derogar o sustituir esta Ley de Partidos. En todo caso, en mis conversaciones con Zapatero le he invitado a que reflexione sobre el respeto a la mayoría social en la sociedad vasca y la necesidad de dar pasos para que que todas las sensibilidades ideológicas estén en las urnas.

¿Ahí también entraría el respeto a la lista más votada en las urnas?

Sobre esto también se ha afirmado que es materia de la negociación presupuestaria y no es cierto. Yo no he planteado a Zapatero nada de eso, entre otras cosas porque me preocupa más el respeto a la mayoría social que el respeto a la lista más votada. En todo caso, el PSE tiene la responsabilidad de hablar claro ante la ciudadanía vasca para revelar desde el principio si piensa extender su acuerdo de bases con el PP a otras instituciones.

¿Qué mínimos exigirán en materia de autogobierno vasco?

El planteamiento de autogobierno que le he trasladado está basado en el respeto a la pluralidad de la sociedad vasca y a su decisión sobre su futuro. Todo ello basado en la bilateralidad entre las instituciones vascas y el Gobierno español. Una bilateralidad que no ha existido hasta ahora en cuanto al compromiso de respeto al Estatuto de Gernika. El autogobierno también nos lleva a reivindicar la proyección exterior de Euskadi y a la presencia de Euskadi en los organismos internacionales.