El cautiverio más largo perpetrado por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI). Los cooperantes catalanes Albert Vilalta y Roque Pasqual cumplieron ayer 254 días de secuestro en la zona del Sahara. 254 de sufrimiento e incertidumbre para sus familiares y amigos. La red de Al Qaeda en el Magreb secuestró a los miembros de la ONG Barcelona Acció Solidaria el pasado 29 de noviembre en Mauritania cuando iban en uno de los vehículos del convoy que transportaba ayuda humanitaria a Senegal. Su compañera Alicia Gámez fue retenida con ellos, aunque fue puesta en libertad el pasado 10 de marzo.
Se sospecha que Vilalta y Pasqual están en algún punto del desierto de Mali, uno de los países donde AQMI ha intensificado su actividad en los últimos años. La ONG Barcelona Acció Solidaria manifestó el domingo su confianza en las gestiones del Gobierno español para rescatar a los cooperantes catalanes, al tiempo que lamentó que ayer su secuestro se convirtiera en el más largo de los cometidos por la organización terrorista. Miembros de la ONG se mostraron "extremadamente cansados" de la situación y de que el secuestro de los dos cooperantes de Barcelona Acció Solidaria se convierta en un "triste récord".
El secuestro más prolongado del que se tenía constancia hasta ahora en esta región era el de un matrimonio austríaco que estuvo ocho meses y nueve días en manos de AQMI en el sur de Túnez. Wolfgang Ebner y Andrea Kloiber fueron capturados el 22 de febrero de 2008 y puestos en libertad el 20 de octubre de ese año, lo que suman 253 días. El tercer secuestro más largo -de 184 días- fue el perpetrado sobre un grupo de europeos en varias acciones armadas en febrero de 2003 en el sur de Argel por el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate, organización argelina que derivó en AQMI en septiembre de 2006. En total, fueron 32 personas, en su mayoría de nacionalidad alemana, suiza y austríaca, integrantes de cinco caravanas.
Otro cautiverio reciente y de larga duración fue el de los italianos Sergio Cicala y Filomene Kabouree en Mauritania entre diciembre de 2009 y abril de 2010, que se prolongó durante 120 días. También los ciudadanos franceses han sido víctimas de varios secuestros, como el de Pierre Camatte, que durante casi tres meses estuvo en manos de Al Qaeda hasta que fue liberado el pasado 23 de febrero en Mali después de que el Gobierno de este país excarcelara a cuatro presos de la red terrorista.
Peor suerte corrió su compatriota Michel Germaneau, de 78 años, raptado en Níger el pasado 19 de abril y asesinado el 26 de julio, pocos días después de que militares franceses participaran en una operación militar conjunta junto a Mauritania contra una base de AQMI en la que murieron tres de sus militantes.