Dos policías resultaron heridos ayer tras estallar una granada arrojada por desconocidos contra la sede en Bangkok del Partido Demócrata, el principal de la alianza que gobierna Tailandia, en cuya capital miles de personas exigen elecciones anticipadas desde hace cuatro semanas. Así, miles de seguidores del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, conocidos como los camisas rojas, hicieron ayer retroceder a policías y soldados e irrumpieron en el centro financiero de Bangkok para exigir la disolución del Parlamento, y luego regresaron a su campamento base.