vitoria. Jon Abril, vicecoordinador de aralar, declaró ayer que "una vez más queda en evidencia que en España se tortura". Estas declaraciones horas después de saberse que la Fiscalía de Gipuzkoa ha solicitado penas de entre tres y dos años a diez guardias civiles por un presunto delito de torturas contra los miembros de ETA Igor Portu y Mattin Sarasola.

Abril se felicitó por la investigación judicial y mostró su confianza en que "llegue hasta el final y el juicio se haga con todas las garantías". Sin embargo, el dirigente abertzale mostró su contrariedad con la solicitud de penas para los autores de este delito, ya que son "demasiado leves para ser ejemplarizantes". A su juicio, es "ofensivo" definir como lesión una "denuncia de tortura y resulta insuficiente castigarla como falta".

El vicecoordinador de Aralar criticó al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, por la postura que mantuvo cuando afloraron las primeras evidencias de malos tratos, en la que se defendió sin ningún atisbo de duda la versión de la Guardia Civil.