Hoy retomamos un ejercicio que ya hemos practicado antes en esta sección: los seis de grados de separación, esa teoría que dice que es posible conectar a cualquier persona del mundo con otra a través de una cadena de cinco intermediarios. Iremos, en esta ocasión desde el flautista de Hamelín hasta Lendakaris Muertos, pasando por, entre otros, el Dúo Dinámico o Andy Warhol, y también haremos el camino de vuelta. 

Arrancamos. Si hay alguien a quien se ha comparado a menudo con el flautista de Hamelín es a Ian Anderson, el fundador de Jethro Tull. Pues bien, ¿sabían ustedes que Ian Anderson participó como instrumentista en un disco del Dúo Dinámico? Tal vez no, porque el disco en cuestión, grabado en Londres en 1969, no se firmó como el Dúo Dinámico sino como Manolo y Ramón y pasó bastante desapercibido. Sobre todo si lo comparamos con otros hits de su carrera, como el inevitable Resistiré

Durante la pandemia esta canción fue interpretada en una especie de We are the world a distancia por cincuenta artistas españoles, entre los que se contaban Hombres G, quienes en sus inicios tocaron en una ocasión en un bar de copas de Madrid para veinte personas y para... Iron Maiden, quienes, al parecer, habían caído algo despistados por allí. Una combinación imposible, casi tanto como la de Lendakaris Muertos compartiendo cartel con Bruce Dickinson. Sucedió en la última edición del festival Resurrection Rock, donde, dicen, los navarros fueron los únicos que consiguieron fotografiarse con el que fuera el cantante original de Iron Maiden.  

Lendakaris Muertos, también durante la pandemia, dedicaron una canción a Miguel Bosé, de quien fue fan declarado ni más ni menos que Andy Warhol, en una de cuyas selectas fiestas neoyorkinas podemos verlo fotografiado junto a Jimmy Page, el guitarrista de Led Zeppelin, quien, ¡atención!, fue otro de los instrumentistas que participaron en la grabación del disco que antes hemos mencionado, Manolo y Ramón, que acabaría reeditándose años después bajo el título El Dúo Dinámico en Londres.

Manolo y Ramón, el Dúo Dinámico, por su parte, fueron los autores del La, la, la, la canción interpretada por Massiel que resultó ganadora del festival de Eurovisión, precisamente en Londres en 1968. El festival tuvo lugar en el Royal Albert Hall, donde se grabaría años más tarde, en 1981, Slipstream, un vídeo de larga duración de ¿quién?, efectivamente, de Jethro Tull, con Ian Anderson al frente. Y así, vamos llegando ya al final, o sea, volviendo al punto de partida, pues Anderson emularía de un modo casi literal al flautista de Hamelín, durante las celebraciones por el 725 aniversario de la publicación del famoso cuento de los Hermanos Grimm, cuando organizó un viaje en tren desde esa localidad alemana, Hamelín, con setecientos niños a bordo que prometió devolver, esta vez sanos y salvos, a sus progenitores.