BUENO, pues ya tenemos nueva dirección en EITB, el ente. Por cierto, curiosa apelación la de ente. El ente. Como RTVE. Escucho esa palabra y pienso en Iker Jiménez y en presencias fantasmagóricas. Que me pierdo. Cambia la dirección y, al margen de otras preocupaciones y consideraciones mucho más importantes y trascendentales, la pregunta clave sigue siendo, como hace cuatro años, ¿qué va a pasar con el mapa del tiempo de ETB? Bien, ya que renace el debate, recupero mi propuesta fallida de entonces, persevera que algo queda. Señores, ya es hora de incluir en la imagen de la información meteorológica Salou, Benidorm y Conil de la Frontera. Los cito como puntos claves, pero admito sugerencias. Y otra cosa, hablando de mapas del tiempo. Que diluvia durante semanas, vale. Que nieva durante cuatro días seguidos, vale. Que tenemos máximas de 19º en pleno invierno, vale. ¿Pero tiene que pasar todo en el escaso plazo de un mes? Un poco de orden, por Dios, esto es esquizofrenia climática o algo.
P.D. Cuando la realidad te da una bofetada, a veces no está mal evadirse. Si no lo hubiera hecho en las líneas anteriores, estaría ahondando en mi vergüenza por la clase dirigente que se perpetúa en Navarra. Bandoleros que se reunían dos veces en sendas reuniones consecutivas de media hora para cobrar por duplicado la dieta de Caja Navarra -entre 3.400 y 5.300 euros- mientras se privatiza el servicio de comida de los hospitales públicos navarros, donde ahora los pacientes comen mierda. Vergüenza.
