Vamos a ver, varias cosas. Primero. El Barça-Real Madrid no, repito, no, es de interés general. Lo digo porque vaticino que el lunes 29 Telecinco me joderá, como suele hacer en estos casos, retrasando CSI o, directamente sustituyéndolo por algún detritus marca de la casa -seguro que aún no han exprimido a Belén Esteban todo lo que se puede-. Segundo: esto es un mensaje para los señores académicos de la RAE. Me niego a quitarle la tilde diacrítica a sólo, a considerar monosílabo guión -¿cómo coño lo leo?- y a hablar de la ye vasca, denominación que carece del glamour de la clásica Y, amén de ser muchísimo menos gráfica. Me declaro desde hoy insumisa de la ortografía y, esta vez, totalmente consciente. Tercero. Una cosa es montar una cutrepeli para la tele con la epopeya de los mineros chilenos y otra muy distinta tirar la casa por la ventana y hacer una porno con la, por otra parte, curiosa apreciación de los productores de que "la intención no es mostrar una tremenda orgía en pantalla, sino hacer algo simpático". Yo tengo dudas: o la peli se adentra en el género del porno gay, o la prota es la cápsula de rescate Fénix 2, o resulta que esa cápsula de rescate se transforma en ascensor de mineras o la respuesta concreta son las tres. De momento, ya hay una actriz contratada para el largometraje, con el improbable y literario nombre, por cierto, de ¡Ana Karenina! Si Tolstoi levantara la cabeza... No me queda claro qué quieren decir con hacer "algo simpático", aunque más me inquieta su pretensión de tratar la historia "con una crítica social". Ya veremos...