Al menos 32 personas han muerto y 63 han resultado heridas en un ataque efectuado por integrantes de la organización yihadista Al Shabaab en la playa de Lido, uno de los lugares más frecuentados por turistas y diplomáticos en la capital de Somalia, Mogadiscio, y escenario en años pasados de algunos de los atentados más cruentos del grupo.

El ataque comenzó en torno a las 19.30 horas del viernes cuando uno de los asaltantes se inmoló frente al hotel Beach View, en medio de un gentío, antes de que otros cinco yihadistas comenzaran a abrir fuego indiscriminado contra los clientes del hotel.

Minutos después, yihadistas y fuerzas de seguridad somalíes comenzaron un tiroteo en el hotel que se prolongó hasta pasada la medianoche, y que se saldó con la muerte de todos los atacantes, según han confirmado fuentes de seguridad a la agencia oficial de noticias somalí SONNA.

La Policía además ha confirmado la desactivación de un coche bomba aparcado en las inmediaciones del lugar del ataque, según un comunicado del Gobierno recogido por el portal Caasimada On Line.

Al Shabaab ha acabado asumiendo la responsabilidad del ataque a través de un comunicado emitido por sus medios afines, informa por su parte el portal de noticias Hiraan On Line.

Somalia ha incrementado en los últimos meses las ofensivas contra Al Shabaab con apoyo de clanes y milicias locales como parte de una serie de decisiones adoptadas por el presidente, Hasán Sheij Mohamud, quien prometió al asumir el cargo en mayo de 2022 poner la lucha antiterrorista en el centro de sus esfuerzos para estabilizar el país africano.

No obstante, siguen produciéndose atentados contra instituciones gubernamentales y contra hoteles o restaurantes de Mogadiscio, donde los islamistas creen que prevalece un estilo de vida occidental. En julio, 11 personas murieron en un atentado terrorista contra un restaurante durante la final de la Eurocopa de fútbol.

Los ataques de Al Shabaab en la playa de Lido son prácticamente cíclicos. Un atentado suicida con coche bomba y un ataque a tiros mataron en enero de 2016 a más de 20 personas. Cuatro años después, otro atentado similar dejó al menos once muertos. En 2023, Al Shabaab mató a seis civiles y tres militares en este mismo escenario de la capital.