El congresista republicano George Santos ha anunciado que no se presentará a la reelección a la Cámara de Representantes de Estados Unidos para el año próximo, después de que la Comisión de Ética haya concluido este jueves que hay "importantes evidencias" de delitos, incluido el uso de fondos de campaña para asuntos propios.

El informe de dicha comisión afirma que Santos cometió una serie de infracciones "a sabiendas y de manera deliberada" en relación a las declaraciones de impuestos presentadas ante la Cámara, sabiendo que su comité de campaña presentó "informes falsos o incompletos" ante la Comisión Federal Electoral.

"Santos buscó explotar fraudulentamente todos los aspectos de su candidatura a la Cámara de Representantes para su propio beneficio financiero (...) Robó descaradamente de su campaña. Engañó a los donantes para que proporcionaran lo que pensaban que eran contribuciones, pero en realidad eran pagos para su beneficio", remarca el esperado informe de más de medio centenar de páginas.

Así, la Comisión de Ética de la Cámara sostiene que Santos se sirvió de sus conexiones para enriquecerse y "todo a través de una serie constante de mentiras a sus electores, donantes y personal sobre sus antecedentes y experiencia".

Las conclusiones del informe, aprobado por unanimidad por la comisión, serán enviadas al Departamento de Justicia, que ya acusó a Santos de múltiples cargos federales, entre ellos suplantación de identidad, lavado de dinero y robo de fondos públicos. Está previsto que vaya a juicio en septiembre, informa la NBC.

Tras conocerse la decisión, Santos ha emitido un comunicado a través de sus redes sociales para criticar el "sesgo" de dicho informe. "La Comisión hizo todo lo posible para difamarme (...) Es una difamación politizada repugnante que muestra lo bajo que ha caído nuestro Gobierno Federal", ha protestado.

"Si hubiera una pizca de ética en la 'comisión de ética', no habrían publicado este informe sesgado (...) Todos los que participaron en este grave error judicial deberían sentirse avergonzados", ha continuado entre ataques al Gobierno.

"Seguiré firme en la lucha por mis derechos y por defender mi nombre ante la adversidad. Me siento humillado una vez más y me recuerdan que soy humano y que tengo defectos, pero no me quedaré quieto mientras me apedrean quienes también los tienen", ha enfatizado.

"Continuaré con mi misión de servir a mis electores hasta que se me permita. Sin embargo, no buscaré la reelección para un segundo mandato en 2024, pues mi familia merece algo mejor que estar bajo la presión de la prensa todo el tiempo", ha dicho, remarcando que defenderá los valores conservadores mientras siga en el Congreso.

No es la primera vez que Santos se enfrentaba a la Comisión de Ética de la Cámara, que le abrió un expediente por después de que admitiera haber mentido en su currículum --incluyendo lazos familiares inexistentes con el Holocausto o el 11-S, antes de ser elegido en 2020, si bien logró salir airoso.