Tribunales prorrusos de la región de Donetsk, anexionada en septiembre por Rusia, juzgará a unos 70 soldados del regimiento Azov y de las Fuerzas Armadas de Ucrania que defendían la acería de Azov, en la ciudad portuaria de Mariúpol, informó hoy la agencia oficial rusa TASS.

Las autoridades investigadoras han completado la investigación de casos de supuestos crímenes de guerra contra unos 70 militares de las Fuerzas Armadas de Ucrania y el batallón Azov, considerado una organización extremista en Rusia, señalaron a la agencia fuentes de las fuerzas de seguridad de Donetsk.

Entre los acusados se encuentran militares de la 36ª Brigada de Infantería de Marina y otras unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania, así como de Azov, que defendieron Mariúpol, en la región oriental de Donetsk, durante casi tres meses del asedio del Ejército ruso.

Según TASS, las autoridades prorrusas todavía planean juzgar a estos militares en el territorio de Donetsk.

El 1 de julio, el jefe del Ministerio de Justicia de la autoproclamada república popular de Donetsk, Yuri Sirovatko, dijo que más de 100 prisioneros de guerra ucranianos fueron trasladados a un centro de detención preventiva bajo sospecha de haber cometido crímenes de guerra.

El batallón de Azov, creado en 2014 en la ciudad de Mariúpol, a orillas del mar de Azov, está plenamente integrada en la Guardia Nacional de Ucrania desde finales de ese año.

Fue fundado por miembros de la extrema derecha para luchar contra los separatistas prorrusos en el este de Ucrania y ganó por primera vez fama por recuperar Mariúpol de las fuerzas rusas en junio de 2014.

Sin embargo, a nivel mundial ganaron notoriedad en la actual campaña militar rusa en Ucrania por su resistencia en condiciones críticas en la acería de Azovstal en Mariúpol hasta su rendición completa en mayo.

De Azovstal salieron casi 2.500 soldados, muchos de los cuales siguen siendo prisioneros de Rusia.