- Los líderes de los ocho principales partidos políticos marroquíes, que representan la casi totalidad del Parlamento, viajaron ayer hasta la frontera de Mauritania, atravesando el polémico paso de Guerguerat.
Nabil Benabdallah, del Partido Progreso y Socialismo, declaró que en los polémicos cinco kilómetros entre la aduana marroquí y Mauritania “no se ve un solo militar, ni tampoco personal de la misión de la ONU”, y que el tráfico es únicamente civil.
Los ocho líderes políticos firmaron una Declaración de Guerguerat en la que alabaron los pasos dados por el rey y por el ejército y, aunque evitaron todo lenguaje bélico, sí mostraron su disposición a “la movilización general de sus militares para enfrentar las maniobras de los enemigos de la integridad territorial”.