Teherán - El presidente iraní, Hasan Rohaní, advirtió ayer a Arabia Saudí del “poder” de la República Islámica, en respuesta a las recientes amenazas de Riad relacionadas con el conflicto del Yemen. “Conocéis bien el poder y la posición de la República Islámica, aquellos superiores a vosotros no han podido hacer nada contra la nación iraní”, dijo Rohaní durante una sesión del Gobierno dirigiéndose a las autoridades saudíes. El presidente subrayó que incluso “Estados Unidos y sus aliados movilizaron todas sus capacidades” sin éxito, según las declaraciones publicadas por la Presidencia iraní. Sobre la situación en el Yemen, punto de discordia actual, Rohaní se preguntó “¿por qué está mostrando hostilidad hacia el pueblo yemení y bombardeándole regularmente?”. Arabia Saudí lidera desde 2015 una coalición de países árabes suníes contra los rebeldes chiíes hutíes y hace unos días acusó a Irán de suministrar a los insurgentes el misil balístico que estos dispararon contra Riad. Las autoridades saudíes han calificado lo sucedido de “acto flagrante de agresión militar” y “posible acto de guerra” y han advertido de que se reservan el derecho “de responder a Irán en el tiempo y forma apropiados”.
El presidente iraní se preguntó también “qué beneficios ha obtenido la animosidad de Arabia Saudí hacia los pueblos de la región”, citando a Siria, Irak y el reciente caso del Líbano. El ex primer ministro libanés, Saad Hariri, renunció a su cargo el pasado sábado desde Riad y acusó en su discurso a Irán de intervenir en los asuntos del Líbano. “No hemos visto antes en la historia que un país obligue a un responsable a renunciar solo para interferir en sus asuntos internos”, contraatacó Rohaní. El mandatario iraní consideró que Arabia Saudí se está aliando con EEUU y con Israel para crear conflictos en la región de Oriente Medio, lo que calificó de “error estratégico y de cálculo”.
rivales por tradición Arabia Saudí e Irán, las potencias suní y chií de Oriente Medio, mantienen una tradicional rivalidad por la influencia regional que se ha exacerbado en los últimos tiempos con los conflictos de Siria y el Yemen. Riad y Teherán no han llegado a un choque directo pero mantienen una guerra subsidiaria (la conocida como proxy war en inglés) en el Yemen, donde el primero respalda al presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, y el segundo, a los rebeldes chiíes hutíes.
Su antagonismo en el Yemen estalló hace cuatro días tras el disparo por parte de los rebeldes de un misil contra la capital saudí, una acción de la que Riad culpó a Teherán por su supuesto papel en armar a los insurgentes. “Agresión militar directa” y “posible acto de guerra contra el reino saudí”, han sido las palabras empleadas entre otros por el príncipe heredero y hombre fuerte saudí, Mohamad bin Salman, quien afirmó también que su país “se reserva el derecho de responder a Irán en el tiempo y forma apropiados”.
El presidente iraní, Hasan Rohaní, contraatacó ayer advirtiendo a Arabia Saudí del “poder” de la República Islámica y de los intentos fracasados de otras potencias como Estados Unidos de doblegarla. ¿Significan estas amenazas que la tensión puede conducir a un choque militar? Los expertos no lo creen, pero apuntan a que el enfrentamiento se puede trasladar a otros países. - Efe