atenas. El proceso judicial contra la cúpula del partido neonazi griego Amanecer Dorado, detenida el sábado por orden de la Fiscalía en conexión a varios actos violentos y asesinatos, entre ellos el del cantante de hip hop Pavlos Fyssas el pasado 18 de septiembre, comenzará mañana martes.
A última hora del sábado, tras ser retenidos durante varias horas en la sede de la Dirección General de Policía, cinco diputados del partido fascista -entre ellos el líder, Nikolaos Mijaloliakos-, 13 dirigentes de la organización y dos miembros de las fuerzas policiales fueron trasladados en medio de un fuerte dispositivo de seguridad a la dependencias judiciales.
Allá se les comunicó los cargos que se les imputan, fundamentalmente el establecimiento de una "organización criminal" con el objetivo de atentar y asesinar.
silencio Los diputados neonazis, que según los medios griegos se negaron a responder las preguntas de sus interrogadores, solicitaron unos días para estudiar el auto de imputación, por lo que el proceso judicial no comenzará hasta mañana martes.
En total, se han emitido por el momento treinta y dos órdenes de arresto, de las que una veintena han sido ya cumplidas.
Tanto en casa de Mijaloliakos como en la de un sargento de Policía detenido fueron halladas armas de fuego sin licencia, armas blancas, bombas de humo y abundante munición. En el hogar del líder de Amanecer Dorado, se descubrieron además 43.100 euros en metálico.
pappás se entrega El sexto diputado cuya detención exigía la Fiscalía por considerarlo el número 2 de la estructura "criminal" de Amanecer Dorado, Jristos Pappás, permaneció huido hasta que en la mañana de ayer se entregó en la Dirección General de Policía. Según las imágenes mostradas por el canal Skaï, Pappás entró en el recinto gritando "Larga vida a Amanecer Dorado".
"En Grecia no hay lugar para las organizaciones criminales, aunque sea bajo la apariencia de partido político", afirmó el sábado por la noche el ministro de Orden Público, Nikos Dendias, dejando bien claro que no se permitirá a ningún grupo "socavar las instituciones del Estado para incitar al odio racial, desafiar los derechos humanos y la perturbación de la paz social".
Nikos Dendias, que anteriormente había sido criticado por su pasividad hacia el fenómeno neonazi, calificó el pasado sábado como un día "histórico para Grecia y Europa", porque "demuestra a todos, especialmente a los jóvenes, que la ley no está desnuda ni desvalida ante la amenaza de la violencia irracional".