Washington/Bruselas. Después de que Reino Unido y Estados Unidos anunciaran que cuentan con información "convincente" sobre el uso de armas químicas en el conflicto sirio, la Unión Europea pidió ayer a la ONU una investigación al respecto. "Por el momento estamos verificando la situación junto a nuestros socios internacionales para determinar lo que realmente ha pasado, porque no parece estar totalmente claro en este momento", indicó el portavoz comunitario de Exteriores, Michael Mann.
"Esperamos que haya una investigación de la ONU dentro de Siria que esperamos que arroje más luz sobre lo que ha pasado", precisó. "Hemos visto que el régimen de Siria no parece que tenga demasiado respeto por la vida humana", apuntó Mann, quien, posteriormente, agregó: "No podemos ser definitivos en esto hasta que hayamos visto evidencias significativas". Washington aseguró el jueves, por primera vez, que sus servicios de inteligencia han apreciado con "diversos grados de confianza" el uso de armas químicas por parte del régimen de Al Asad, mientras que Londres mantiene que cuenta con información "limitada pero convincente" sobre el empleo de ese tipo de armamento en Siria. El primer ministro británico, David Cameron, abogó ayer, durante una entrevista en la BBC, por aumentar la presión sobre el régimen sirio para poner fin al conflicto, pero consideró "improbable" que el Reino Unido envíe tropas al país.
Tomarlo en serio El primer ministro reconoció que "hay que tomarse muy en serio" las informaciones que indican que se han usado armas químicas en la guerra civil en Siria. Las pruebas son "limitadas pero convincentes", afirmó el jefe del Gobierno. "Es muy perturbador lo que vemos -incidió Cameron-. Las pruebas son limitadas pero crecientes del uso de armas químicas, probablemente por parte del régimen". "Es muy grave, esto es un crimen de guerra y debemos tomarlo muy seriamente", añadió el premier, quien no obstante advirtió contra "actuar con precipitación". "Siempre he sido partidario de hacer más. Por eso trabajamos con la oposición, queremos hacer más junto con nuestros aliados y socios para dar forma a esa oposición y asegurarnos de que apoyamos a la gente con los motivos correctos que quiere un buen resultado, para poner presión sobre el régimen y ponerle fin", manifestó. Preguntado si el Reino Unido podría enviar tropas a Siria, respondió: "No quiero que eso suceda y no creo que sea probable".
"Desde mi punto de vista, lo que tenemos que hacer es dar forma a esa oposición, trabajar con ellos, formarles y guiarles, a fin de poner presión al régimen y acabar con el conflicto", señaló Cameron, quien apostilló: "Es muy difícil y extremadamente frustrante". Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, sostuvo ayer, durante su rueda de prensa diaria, que el Gobierno estadounidense sigue trabajando e investigando para emitir un "juicio definitivo" sobre el uso de armas químicas en Siria y si se ha cruzado la "línea roja" fijada por el presidente Barack Obama. "Tenemos algunas evidencias, pero debemos ampliarlas", señaló Carney. El portavoz del presidente Obama insistió en que son necesarios "hechos creíbles y confirmados" sobre el uso de armas químicas en Siria antes de tomar cualquier decisión al respecto. Durante su viaje a Emiratos Árabes Unidos, el secretario de Defensa, Chuck Hagel, indicó el jueves que los servicios de inteligencia estadounidenses habían concluido con "diversos grados de confianza" que ha habido uso de armas químicas por parte del régimen. Sin embargo, la Casa Blanca aseguró después que las evaluaciones de inteligencia sobre el uso de armas químicas aún no son "suficientes" y argumentó que son necesarios "hechos creíbles y confirmados" antes de tomar decisiones.