parís. El presidente electo de Francia, François Hollande, comenzó ayer a preparar el traspaso de poderes para asumir el cargo, el próximo 15 de mayo, y la reunión clave con la canciller federal alemana, Angela Merkel, para hablar del futuro de Europa. Hollande se reunió desde primera hora de ayer con los responsables del Partido Socialista francés en la sede de la formación en París, después de una intensa noche de celebraciones populares en la capital tras conocerse su victoria electoral.

Miles de personas habían celebrado hasta la madrugada una jornada vivida como histórica y que recordaba la que hace 31 años protagonizó el único presidente socialista que ha tenido Francia en la V República, François Mitterrand.

Hollande y Sarkozy tendrán oportunidad de encontrarse hoy en una ceremonia oficial de conmemoración del armisticio de la II Guerra Mundial, primer acto oficial entre el presidente saliente y el electo, una imagen que Sarkozy prefirió evitar cuando hace cinco años tuvo oportunidad de protagonizarla junto a Jacques Chirac.

El director de campaña de Hollande, Pierre Moscovici aseguró que el traspaso de poderes entre Sarkozy y Hollande es "republicano y tranquilo" y enumeró los contactos internacionales que ya tuvo ayer el presidente electo.

Otro de los colaboradores más estrechos del presidente electo, el diputado socialista de origen español Manuel Valls, dijo que la llegada al poder de Hollande es "importante para los socialistas y para Francia, pero también para toda Europa". "Esta victoria significa mucho para Francia porque es el principio del cambio que el país necesita", declaró Valls preguntado junto a la sede del Partido Socialista, donde la dirección de esta formación analizaba las consecuencias del histórico avance protagonizado por Hollande.

Por delante le quedan sin embargo a Hollande intensos días antes quizás del encuentro con Merkel, pues debe cumplir con los plazos oficiales, entre los que el principal es el de la formación de su nuevo Gobierno. Pero posteriormente tiene una apretada agenda internacional y,a falta de una fecha concreta para esa cita urgente en la capital alemana, Hollande tiene que encajarla con su desplazamiento a Estados Unidos para la cumbre del G8 en Camp David el 18 y el 19 y que encadenará con la de la OTAN en Chicago el 20 y el 21.

Durante todo el día el interés se centró en Francia, además, en explorar las estrategias de los partidos franceses con vistas a la próxima cita electoral, los comicios legislativos de junio, que darán la clave del respaldo parlamentario con el que podrá contar Hollande.

Y para esas elecciones ya se conoce que el todavía ministro de Exteriores, Alain Juppé, no estará disponible, puesto que ayer mismo anunció que se dedicará a su labor como alcalde de Burdeos y no perseguirá un asiento en la Asamblea Nacional.

Sarkozy, por su parte, recibió ayer a su comité de campaña a las 14,00 horas en el Elíseo. Fueron una veintena de personas, entre los que se encontraba François Fillon y los representantes de las diferentes sensibilidades del partido. La reunión, debido a la fatiga de la larga noche electoral, durço apenas una hora y en ella señaló que "Se cierra una página para mí. No seré candidato ni a las legislativas ni a ninguna de las próximas elecciones. Quiero decir que definitivamente, lo dejo", señaló Sarkozy.