el cairo. Al menos trece iraquíes, nueve de ellos funcionarios de prisiones, murieron ayer y otros 28 resultaron heridos en un atentado suicida contra un centro penitenciario situado en las afueras de Bagdad, informó una fuente policial. La fuente aseguró que un suicida hizo estallar un coche bomba en el exterior de la cárcel Al Tayi, situada 30 kilómetros al norte de la capital iraquí, y precisó que diez de los 28 heridos son también funcionarios de esa prisión. Los cadáveres quedaron calcinados, ya que el coche bomba explotó junto a un grupo de guardas de la prisión. Las fuerzas de seguridad cercaron el lugar del atentado mientras las ambulancias trasladaban a los heridos a los hospitales cercanos, agregó la fuente.
En el atentado quedaron dañados varios coches civiles que se hallaban en los alrededores de la cárcel.
La zona de Al Tayi es escenario frecuente de actos terroristas como el de ayer. Hace solo tres semanas cuatro personas, entre ellas la esposa y un hermano de un dirigente de la milicia progubernamental "Consejos de Salvación", perdieron la vida por el estallido de artefactos explosivos. Las explosiones, que fueron activadas a distancia, causaron también once heridos, entre ellos varios hijos del propietario del hogar, y la destrucción total de la casa.
Más tarde, al menos dos personas murieron y un diputado iraquí resultó herido por la caída de un misil cerca del Parlamento iraquí, en la fortificada Zona Verde de Bagdad, según una fuente de la policía. La fuente explicó que por el momento se desconoce el lugar desde donde fue lanzado el misil -de tipo hawk- y qué grupo puede estar detrás de este ataque. Las dos víctimas mortales no habían sido identificadas, mientras que el herido es el diputado Muayed al Tayeb, que fue trasladado a un hospital. La Zona Verde, en el centro de la capital iraquí, alberga los principales edificios gubernamentales.
