Sidney. La primera ministra australiana, Julia Gillard, desenterró ayer durante su segundo día de campaña electoral, la opción de que Australia sea una república cuando concluya el reinado de Isabel II, la actual jefa de Estado.

Gillard, líder del Partido Laborista retomó así la idea defendida por su antecesor, Kevin Rudd, y que hace doce años expuso por vez primera el entonces jefe de las filas conservadoras, Malcolm Turnbull.

La candidata laborista indicó que propiciará el debate nacional sobre el cambio de sistema a pesar de que como republicana y al igual que muchos australianos siente un "profundo afecto" por la soberana británica, de 84 años. "Lo que realmente quiero ver como primera ministra es que trabajamos para llegar a un acuerdo sobre el modelo de república", dijo Gillard.

Creo que el momento apropiado para que esta nación se convierta en una república será cuando veamos cambiar de monarca", precisó la primera ministra de Australia. Pero en 1999 tuvo lugar en el país un referéndum en el que vencieron los partidarios de la monarquía.