Alternativas más higiénicas y naturales a la clásica alfombra de baño
Suponen una evolución del tradicional tapete de algodón hacia otras opciones que permiten disfrutar de una casa más limpia sin perder la comodidad ni el estilo
Durante décadas, las alfombrillas de algodón han sido un clásico en cualquier baño. Suaves y mullidas, su misión principal es evitar resbalones y recoger el exceso de agua de los pies tras salir de la bañera o de la ducha. Sin embargo, con el paso del tiempo se ha comprobado que son un foco de humedad, moho y bacterias, por lo que para mantenerlas en perfecto estado es necesario lavarlas con frecuencia y renovarlas cada pocos meses.
A la vez que los baños evolucionan hacia espacios minimalistas, funcionales y más fáciles de mantener, sus accesorios también se adaptan a las nuevas necesidades; tal es el caso de las alfombrillas. Actualmente existen alternativas que van desde materiales naturales como la madera, la piedra, el bambú, el yute o el seagrass, hasta opciones más modernas como los tapetes anti-laguna de memory foam de secado rápido.
A continuación analizamos en detalle cada uno de estas distintas opciones.
El accesorio de Leroy Merlin que impide los resbalones en el baño
Alfombras de madera de acacia
Ganan terreno como una de las opciones más sostenibles y estéticas. A diferencia de las alfombras textiles, no absorben humedad, sino que permiten que el agua se evapore de forma natural, evitando malos olores y lavados constantes.
Se pueden enrollar fácilmente, tienen tacos de goma antideslizantes y son muy ligeras, lo que facilita la tarea de retirarlas y guardarlas. En definitiva, un accesorio higiénico, duradero y con un toque natural que encaja con cualquier estilo de baño.
Alfombrillas de piedra natural o diatomita
La principal ventaja de estas alfombrillas es su capacidad de absorber el agua de forma casi instantáneay evaporarla en cuestión de minutos, evitando esa desagradable sensación de pisar una alfombra mojada.
Son antideslizantes, no retienen olores ni se pudren con la humedad y requieren muy poco mantenimiento: basta con colocarlas de pie una vez a la semana para que se terminen de secar. Además, al impedir la proliferación de bacterias, son una de las opciones más higiénicas para un baño moderno.
Alfombras de bambú
El bambú es uno de los materiales estrella por su resistencia y su carácter ecológico. No absorbe la humedad, se limpia fácilmente con un paño húmedo y ofrece una larga vida útil sin perder el color ni deformarse.
Su acabado natural aporta calidez y encaja con estilos decorativos minimalistas o zen. Además, este tipo de accesorio hará de tu hogar un espacio más sostenible.
Alfombras de yute y seagrass
Destacan por su aspecto rústico y su ligereza. Estos materiales naturales son resistentes, fáciles de limpiar y aportan un aire fresco y relajado al baño.
Son ideales para colocar en servicios bien ventilados o para quienes priorizan la estética orgánica frente a lo tradicional.
Alfombrillas de memory foam
Son una evolución moderna de las alfombrillas textiles y son ideales para quienes no quieren renunciar a la sensación mullida bajo los pies. Diseñadas para secarse en segundos, evitan la acumulación de humedad y ofrecen un extra de confort gracias a su espuma viscoelástica.
Los modelos más actuales incluyen bases antideslizantes y diseños minimalistas y son una solución práctica para hogares con niños o personas mayores, ya que combinan seguridad con comodidad.
Como hemos visto, la evolución de la tradicional alfombrilla de baño hacia estas nuevas alternativas no responde solo a razones higiénicas, sino también estéticas y prácticas.
Presentes en los baños actuales, estas alfombrillas, confeccionadas en materiales que permiten un secado más rápido evitando así las negativas consecuencias de la humedad, hacen de ellos unos espacios más amplios, limpios y funcionales, y conviven en perfecta armonía con las tendencias decorativas más actuales.