El aceite de oliva virgen es el top entre los aceites y grasas aptos para el consumo humano, tanto por su virtudes gastronómicas como por las nutricionales. Con respecto a este aspecto, el Instituto de la Grasa, dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha trabajado sobre una nueva clasificación que los ordene teniendo en cuenta los distintos lípidos que presenta, puntuándolos según un algoritmo específico. El resultado de este estudio, con una lista de 32 aceites y grasas de origen tanto vegetal como animal, lo ha dado a conocer en la revista Nutrients.
Como era de esperar, los diferentes aceites de oliva se encuentran en los puestos de cabeza, siendo el de oliva virgen el que encabeza la tabla con 100 puntos. El aceite de oliva y el orujo de aceite de oliva ocupan las tercera y cuarta posición, empatados a puntos, 86. Esto significa que si bien en lo gastronómico y culinario puede haber diferencias, no las hay en lo nutricional. Pero la sorpresa se encuentra en el puesto dos, donde se ha colado un invitado inesperado y bastante desconocido, o cuando menos desaprovechado, en nuestras cocinas, el aceite de lino, la linaza.
Este aceite que se extrae de las semillas de la planta de lino tiene el mismo valor nutricional que el de oliva, por lo que puede ser una alternativa mas que razonable al de oliva y también sustituir al de girasol, tanto al común, que está en el puesto 21, como al alto oléico, en el sexto.
Este aceite de lino es una fuente rica de uno de los ácidos tipo omega 3, lo que lo convierte en una buena alternativa para las personas que consumen poco pescado (bien por problemas de alergia, bein por no tener una acceso fácil a este alimento, y para vegetarianos y veganos.
Además resulta beneficioso a la hora de reducir del organismo el azúcar y el colesterol en sangre., lo que ayuda a prevenir problemas cardiovasculares , así como diabetes, cáncer, osteoporosis y artritis.
Una de las ventajas del aceite de lino es que además de liquido, se puede emplear también en la cocina la semilla entera, sin manipular, o también como harina. No pierde sus virtudes en ninguna de estas presentaciones. Por ello, con él se puede desde enriquecer ensaladas hasta hacer repostería o panes. Su sabor a frutos secos puede aportar un atractivo distinto a los platos.
Por ponerle alguna pega, tiene cierta facilidad para la oxidación, lo que hace que con el tiempo tienda a amargarse un poco, por lo que resulta prudente guardarlo y almacenarlo con cuidado, es decir, bien cerrado, en un lugar fresco (incluso en el frigorífico) y alejado de la luz.
Receta de tostadas de sardinas con aceite de lino
Ingredientes
- 8 sardinas
- 4 rebanadas de pan
- Medio pimiento verde
- Medio pimiento rojo
- Medio pimiento amarillo
- Una cebolla
- Un tomate
- Pimentón dulce
- Sal
- Aceite de oliva
- Aceite de lino
Elaboración
Cortar en tiras el pimiento verde, el pimiento rojo y el pimiento amarillo cortados en tiras, la cebolla en juliana y el tomate en dados. En una sartén con aceite de oliva a fuego medio se pocha la verdura junto con una cucharadita de pimentón dulce, la sal. Mientras, tostar la rebanadas de pan. Extender la verdura sobre el pan bien escurrida, colocar dos sardinas abiertas por la mitad en cada tostada, rociar con el aceite de lino y en un horno precalentado a 180º, meter durante 5 minutos hasta que el pescado esté asado.
