El número de edificios del Casco Viejo con un deficiente nivel de conservación está en una amplia horquilla entre el 20 y el 41%, según la fuente de datos que se consulte, apuntan los redactores del nuevo plan especial de reforma interior (PERI).
En cualquier caso, Vitoria tiene pendiente aún el reto de renovar un cuarto de la edificación del barrio, sobre todo residencial, ya que algunas iglesias, palacios y casas señoriales ya se han reformado los últimos años.
En este sentido, la accesibilidad es una de las principales debilidades de las casas del Casco Viejo, dada la dificultad para colocar ascensores, ya sea por la estrechez, tamaño de la parcela, impedimentos para acceder a la planta baja o por el elevado coste de la obra.
Sin ascensor
En este momento, solo el 17% de las viviendas tiene ascensor, y únicamente el 26% de las casas es accesible. Para los edificios restantes, el inventario de la sociedad municipal Ensanche 21 ha realizado un análisis sobre la viabilidad de poner un elevador.
Según los datos, hay 482 edificios sin ascensor, en el 22% de ellos es viable instalar ascensor, porcentaje que aumenta al 33% de instalarlo por el exterior. En cambio, en el 56% de los edificios, más de la mitad, es inviable poner ascensor y en el 12%, la viabilidad es escasa.
Además, analizando las licencias concedidas, desde 2006 se han instalado 35 ascensores en edificios de viviendas, aunque existe alguna incongruencia en 4 casos, según los datos del inventario E21, y en otros 4 casos, en los que la instalación es posterior a 2018: Cuchillería 2; Correría 26 y 48 y Plaza España 13.
Para jóvenes
Puesto que, como el estudio demuestra, el 56% de los edificios no podrá ser accesible, considera el PERI que es necesario aceptar esta situación y tomar medidas para amoldar la oferta habitacional de estos edificios a personas con buena movilidad.
Por ejemplo, habla el PERI de la posibilidad de destinar estas casas al alquiler para jóvenes, a cambio de que propietarios mayores puedan acceder a viviendas accesibles en la última etapa de su vida, por ejemplo, en viviendas dotacionales en plantas bajas vacantes.
La alternativa es “una sustitución sistemática de edificios históricos que parece difícil desde el punto de vista patrimonial, social y ecológico”, apunta el Ayuntamiento.
Eficiencia energética
La escasa eficiencia energética es otro de los déficits fundamentales de los edificios del Casco Viejo.
Por su época de construcción, las edificaciones no suelen gozar de una buena eficiencia energética, ya que el aislamiento térmico y las carpinterías con rotura de puente térmico son mejoras de las últimas décadas.
Un análisis de las inspecciones técnicas de la edificación ITE publicadas en la plataforma de datos abiertos de Euskadi apunta que los edificios del Casco Viejo suelen tener las calificaciones energéticas más bajas.
Riesgo de pobreza energética
Así, el 87% de las certificaciones publicadas presentan valores entre la E y la G.
Tres cuartas partes de las edificaciones tienen un consumo de entre 200 y 400 kWh/m² al año, lo que supone, aproximadamente, entre 3,7 y 7,3 veces el consumo de un edificio nuevo con una calificación energética A.
Esta realidad muestra dos problemas: la gran pérdida de energía y, por lo tanto, económica en los edificios del Casco Viejo.
Y el enorme riesgo de pobreza energética que corre la población que habita en estas casas debido a la baja eficiencia, el severo clima invernal de Vitoria y las bajas rentas del vecindario del Casco Viejo.
Rehabilitación
Precisamente, 52 vecinos y vecinas del Casco Viejo recibirán 221.300 euros para la rehabilitación de sus viviendas y edificios.
El gobierno de Maider Etxebarria acaba de aprobar la sexta resolución de las subvenciones que concede el departamento de Modelo de Ciudad, en colaboración con la sociedad municipal Ensanche 21.
Estas ayudas están dirigidas a la instalación y renovación de ascensores; a la mejora de la envolvente energética de las viviendas; a la ejecución de trabajos para la consolidación estructural de los edificios; a la mejora de la accesibilidad y a la sustitución de instalaciones obsoletas, entre otras actuaciones.
Cuantía media
La cuantía media de las ayudas se sitúa en 4.255 euros, siendo de 41.029 euros la de mayor importe y de 195 euros la de menor; todo ello en función del tramo de renta de la persona solicitante y de las características de la obra.
Las últimas 52 ayudas que han recibido el visto bueno del Ayuntamiento representan el 70% de las 74 solicitudes presentadas. Las 22 restantes se han quedado fuera por incumplimiento de los requisitos, desistimiento o renuncia.