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Vivienda, sector primario y participación, preocupaciones que se repiten en la Álava Rural

Se han detectado durante el proceso participativo del Programa Comarcal de Desarrollo Rural

Vivienda, sector primario y participación, preocupaciones que se repiten en la Álava RuralCedida

Aunque se ubican en distintos puntos cardinales del territorio y cada una tiene sus particularidades, tres preocupaciones son las que se repiten en la Álava rural, según han hecho saber sus entidades, habitantes y asociaciones: vivienda, sector primario y participación.

“El de la disponibilidad de vivienda es porque, obviamente, también afecta a nivel rural. En cuanto al sector agroalimentario, ha salido cómo afrontar el relevo generacional y cómo actualizar las formas de producción y consumo local y todo, lo que tiene que ver con la cadena de alimentación en su totalidad. Pero también preocupa el emprendimiento y la participación”, avanza la gerente y fundadora de Ingoin, Maddalen Gil López de Lacalle, que es la cooperativa que se está encargando del proceso por encargo de las seis asociaciones de desarrollo rural alavesas (Añana, Mairuelegorreta, Lautada, Rioja Alavesa, Izki y Zabaia) para dar forma al Programa Comarcal de Desarrollo Rural 2023-2027.

Se insta a explorar las cooperativas en cesión de uso, para una vejez en comunidad, que comparta espacios y cuidados

Economía y calidad de vida

Así, tras este proceso que empezó en noviembre y que ha incluido cuatro fases, el próximo 4 de abril tendrá lugar la presentación final de este documento, que tiene por objetivos fortalecer el desarrollo económico de las comarcas alavesas y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Será cuando se entregue al Gobierno Vasco, con todo el trabajo previo realizado y gobernanza del mismo.

Y a partir de ahí serán los comités de cada cuadrilla, compuesto por la ADR (Asociaciones de Desarrollo Rural), Cuadrilla y Ayuntamientos, entre otras, los que irán organizando la priorización de acciones de lo que resta de 2025 y para los próximos años.

Imágenes de las sesiones participativas llevadas a cabo en las comarcas alavesas, facilitadas por Ingoin, cooperativa que se encarga de este proceso.

“De la comarca y para la comarca”

Gil López de Lacalle lo define como un programa “de la comarca para la comarca”, tocando cuáles son sus realidades, necesidades y potencialidades”.

Y, como dice, se ha conseguido hilar “muy fino”, gracias a la amplia colaboración conseguida, con una media de 30-35 participantes en cada uno de los tres talleres realizados por comarca, “y eso que eran sesiones demandantes, de unas tres-cuatro horas de duración”.

Los espacios de transformación agroalimentaria de la Llanada son una de las potencialidades detectadas

Además, ha sido de lo más diversa, gracias a la colaboración tanto de entidades (Ayuntamientos, concejos, Cuadrilla, etc.), personal técnico, pero también de personas autónomas, emprendedoras, personas migradas, del sector más cultural, asociaciones deportivas, trabajadores del patrimonio material e inmaterial, ganaderos, agricultores...

“Muy enriquecedor”

“Un proceso que ha sido muy enriquecedor, al poderse escuchar, y el saber en qué andan las diferentes instituciones para poder sumar propuestas muy fundamentadas en lo qué pasa, en la realidad de la comarca. Tiene valor cómo se ha construido, para poder dejar las semillas sembradas y llevar a cabo las acciones de forma cooperativa”, remarca.

BUSCANDO LA DIVERSIDAD DE VOCES DE LA COMARCA

Diversas voces de Álava están dando forma al Programa Comarcal de Desarrollo Rural 2023-2027. Para ello, se han realizado procesos participativos con los que poder hacer un diagnóstico-sistémico de cada comarca, gracias a la colaboración de diferentes entidades público-privadas y diferentes agentes. Después, se ha construido una visión de futuro “y ahora estamos en la definición de los 12 ejes estratégicos para el desarrollo rural de cada una de las seis comarcas”, concreta la gerente y fundadora de Ingoin.

Ahora se encuentran en la cuarta fase, que es la integración y definición de las líneas de actuación por cada uno de los ejes, para lo que están reuniéndose con el personal técnico de las cuadrillas.

Paralelamente, se definen los indicadores de impacto sobre cómo se le va a dar seguimiento. Y también, muy importante, cómo va a ser la gobernanza del programa a acordar: quién lo va a hacer, quién le va a dar seguimiento, cada cuánto, cómo se va a retroalimentar... Todos estos resultados de la cuarta fase se validan con el comité de dirección de cada comarca, que será el responsable del seguimiento del programa.

Imágenes de las sesiones participativas llevadas a cabo en las comarcas alavesas, facilitadas por Ingoin, cooperativa que se encarga de este proceso.

Es la primera vez que se hace como tal en el formato de programa comarcal porque anteriormente las ADR contaban con el PDR (Programa de Desarrollo Rural), “por lo que se entendía como un programa de la propia asociación, pero tras una actualización en la Ley de Desarrollo Rural, en 2022, se estableció la necesidad de un gobernanza más coordinada entre las propias entidades de las comarcas”.

Pero para definir esas líneas estratégicas, primero había que saber qué fortalezas y debilidades había.

Vivienda

Por ejemplo, en disponibilidad de vivienda se propuso, cómo ante tanta que hay vacía, si se puede ampliar el parque inmobiliario, para mejorar su oferta de alquiler y compra “y explorar otras modalidades, cómo pueden ser las cooperativas en cesión de uso, con modelos más colectivos, para hacer frente a esta realidad, y dar salida a una vejez en comunidad, compartiendo espacios y cuidados”.

Aparte, también han aparecido los propios apoyos y ayudas para rehabilitarlas y encarar así la despoblación y el reto demográfico.   

Participación

Otro tema muy recurrente ha sido el de participación y atención comunitaria para saber cómo fortalecer el tejido comunitario entre las nuevas generaciones y las anteriores. 

“Y también la rehabilitación propia de los concejos y de las juntas administrativas, en el sentido de qué actualizaciones se necesitan para asegurar que haya una renovación y relevo generacional también de los órganos de base, de los concejos y juntas, en esa participación”, agrega.

Junto a ello, también se ha comentado cómo tener un comercio de más proximidad, cómo facilitar también el relevo en los gremios y en ciertos servicios básicos que son importantes para la vida de los pueblos. Y cómo se pueden favorecer a través del emprendimiento, formación...

Asimismo, ha surgido cómo fortalecer los planes de bienvenida, no solo para personas migradas, sino para todas las que se muden para facilitar esa convivencia “y hacer esa integración de forma más diseñada y acompañada”.

Potencialidades

Aparte, también se han detectado potencialidades, entendidas como buenas prácticas que ya se tienen en las comarcas y proyectos que puedan ser llevados de nivel local a comarcal.

Entre ellas, los espacios de transformación agroalimentaria de Llanada Alavesa creado para ayudar a diversificar en este sector, para no solo producir su materia prima, sino también a transformarla y agregarla valor.

“Un ejemplo es el espacio Erausquyn, para que se pueda poner de forma colaborativa al servicio entre comarcas, desde compartiendo instalaciones hasta información o estrategias...”, ilustra la CEO de Ingoin.