La Asociación de Bodegas de Rioja Alavesa (ABRA) ha presentado este lunes en Bilbao la marca A, con la que busca identificar los vinos elaborados en Álava y aumentar el consumo de estos en la capital vizcaína.
Con este evento pretenden hacerse con un hueco en el mercado vizcaíno, donde se consume mucho vino de Rioja, pero poco vino de Rioja Alavesa. En concreto, la asociación ha señalado que, del total de vino de la DOCa Rioja que se consume en la capital vizcaína, solo un 18% es alavés.
Tras la exposición de este lunes el día 25 presentarán la marca A en Donostia e Itxaso Compañón, la presidenta de ABRA, ha animado a todas las bodegas de la comarca a sumarse a la campaña
Situación grave
Esta marca surge en un momento en el que el sector atraviesa por una situación crítica. En este sentido, las 80 bodegas de ABRA realizaron el pasado mes de octubre una declaración conjunta para comunicarle a la sociedad vasca que la situación se viene agravando en los últimos años y que se está llegando al límite.
Los representantes de ABRA indicaron que cada año se cierran más bodegas en Álava por la grave situación del sector y la evolución de los precios de la uva, asegurando que los costes de producción les están ahogando.
Por ello, con este acto, las bodegas que conforman la entidad hacen un llamamiento a los amantes de vino del País Vasco para fomentar el consumo del vino alavés.
Datos de la cosecha de 2024
En el transcurso del evento desgranaron los datos sobre la cosecha de 2024, culminada con 66,7 millones de kilos recolectados, con 59,2 millones de kilos de variedades tintas y 7,5 millones blancas.
Aunque estos datos iniciales sugieren una cosecha menor que la de 2023, cuando se obtuvieron 75,6 millones de kilos, desde ABRA han señalado que se espera una reducción adicional debido a factores como las condiciones climáticas y la práctica de la cosecha en verde en algunas parcelas, donde se prioriza eliminar racimos para optimizar la calidad del fruto.
Dificultades añadidas
Desde la entidad han detallado que a las dificultades citadas se suma la escasez de mano de obra, un factor que tuvo influencia directa en el retraso del proceso y el cual exigió un esfuerzo extra, puesto que la vendimia comenzó al mismo tiempo en toda la comarca alavesa.
En todo caso, la presidenta de ABRA ha manifestado que a pesar de que ha sido una cosecha complicada están satisfechos.
Por otra parte, ha relatado que a su juicio, esta vendimia ha puesto en evidencia la capacidad de adaptación y la resiliencia de los bodegueros de ABRA, añadiendo que la vendimia del año 2024 pasaría a la historia como como un símbolo de resistencia, profesionalismo y esfuerzo.