Una iniciativa singular ha cobrado vida en el ámbito de la danza en Vitoria. En Gasteiz Baila, escuela de baile de la ciudad, la inclusión y la expresión artística han convergido de manera notable, ya que por segundo año consecutivo imparten clases de baile diseñadas específicamente para personas con discapacidad visual.
Este proyecto, propuesto por Valeria Petry, profesora de baile en Gasteiz Baila, nació en colaboración con la ONCE. Inicialmente programado para una vez a la semana, los miércoles por la mañana, la profesora tiene la aspiración de ampliarlo a dos clases, siguiendo su idea original.
"En las clases se dan cuenta de que no tienen límites. Ellos hacen todo lo que yo hago con las demás personas de las otras modalidades de baile"
Valeria siempre ha sido bailarina, y cuando vio a una profesora que enseñaba a ciegos, se interesó; hasta que tras más de 5 años de lucha, logró formar el grupo con el que ahora trabaja cada semana.
"En las clases se dan cuenta de que no tienen límites. Ellos hacen todo lo que yo hago con las demás personas de las otras modalidades de baile", ha mencionado Valeria Petry. Además, estas lecciones de baile sirven de ayuda para las personas ciegas en su día a día. "Es ocio, y es divertido, porque yo trato que nos riamos", ha añadido.
La profesora se centra en ayudar a los alumnos a orientarse en el espacio, siendo consciente de que ninguno de ellos perdió la vista desde el nacimiento. Por ello, Valeria afirma que es "más fácil" ayudarles a guiarse, porque aunque hayan perdido la vista, "ya saben de lo que les hablas". Pero lo cierto es que a la profesora le gustaría que a la escuela se acercaran personas invidentes de nacimiento, para "probar otra experiencia".
Incluso ha contado que en una de las clases se vendó los ojos para hacer lo mismo que sus alumnos y alumnas. "Yo no soy maestra especializada, soy profesora de danzas, por eso lo hablé y me dijeron que no habría problema. No tenemos obstáculos, y no hay límites", ha mencionado Valeria.
Con más de 30 años de experiencia en el mundo de la danza, Valeria no se considera una maestra especializada en este campo específico, argumentando que la experiencia es su mejor formación; aunque reconoce la necesidad de una comunicación más detallada para dirigir cada paso. "Pero hacemos de todo: bachata, merengue, rock… se hace corto", ha afirmado la profesora.
"Los alumnos se olvidan de todo en una hora para ellos en la que dejan fuera sus problemas"
Estas clases acogen a alumnos y alumnas de todas las edades, entre las que se encuentra Violeta, una alumna de 82 años que disfruta de la danza sin restricciones: "Siempre me ha gustado el baile y nunca había dado clases. Me gustaba la idea de hacer gimnasia, y si aprendo a bailar, mejor", ha mencionado la aprendiz de baile. Violeta también ha afirmado que se nota "más suelta" desde que empezó, ya que por aquel entonces estaba "como una tabla", pero ahora nota "más agilidad".
Otro de los alumnos que visita la escuela cada semana es Javi, que ha afirmado que acude a las clases de baile porque "le gusta" bailar y quiere "soltar la espalda y la cintura". Además, ha mencionado que siempre lo hace "contento y feliz", que las clases son "muy amenas", y que está "muy contento" con el grupo.
Entre los beneficios de acudir a estas clases, destaca especialmente uno. Y es que, como dice Valeria, los alumnos "se olvidan de todo" en una hora "para ellos" en la que "dejan fuera sus problemas".
Hay alrededor de 100 personas en toda la escuela. También hay gente que va cuando quiere. "A mis clases se puede ir y venir cuando cada uno quiera porque no tiene seguimiento, pero las demás clases van avanzando", ha dicho Valeria.
Por otro lado, y mirando hacia el futuro, Valeria ha lamentado la falta de publicidad de sus clases para invidentes: "Tal y como estamos ahora, siempre habrá unas 8 personas. Esto necesita un empuje".
Clases de TikTok
Las breves y pegadizas coreografías de baile son las que últimamente están de moda entre los más jóvenes. Y en Gasteiz Baila no se lo pensaron dos veces cuando hace un par de años decidieron añadir esta modalidad de coreografías a su oferta de clases.
"Por lo general, es para adolescentes, no viene gente mayor", ha afirmado Valeria, que no es la profesora encargada de dar estas clases de TikTok. La maestra ha mencionado que los alumnos y alumnas saben copiar una coreografía fácilmente, pero las de TikTok son muy fáciles.
Por ello, en la escuela de baile les invitan a practicar técnicas que van más allá de imitar una simple coreografía: "TikTok es solo una pantalla, pero aquí tienen la posibilidad de moverse en el espacio", ha añadido Valeria.
El K-pop, también presente
Se trata de un género musical coreano que hace unos años experimentó un "boom" y hoy en día lo bailan muchos jóvenes; y es una modalidad de la cual también se imparten clases en la escuela de baile vitoriana.
La mayoría de los que practican este baile en la academia son adolescentes, niños y niñas. Las coreografías son más difíciles que en las clases de TikTok, porque el K-pop es una mezcla de muchos de estilos: urbano, moderno, contemporáneo…
Es el segundo año en el que Valeria Petry da clases de K-pop, pero ha afirmado que el del año pasado era un grupo que ya estaba formado, y que por lo tanto era "más difícil". En cambio, este año son todas niñas, algunas se conocen, y les encanta bailar. Valeria ha mencionado que las trata "como profesionales".
Tienen dos clases a la semana y una de ensayo. Además, acaban de empezar con las exhibiciones, y es de mencionar que el 10 de mayo actuarán en el Buesa Arena en el partido del Baskonia.
Por otro lado, en la escuela también hacen bailes para despedidas de soltera o coreografías de boda. Para estas clases los alumnos pagan algo más al tratarse de una formación exclusiva para el grupo en cuestión. Los participantes acuden solo una vez y reciben una sesión de una hora y media de duración en la que se les dan las pautas lograr los mejores pasos de baile en sus festejos.