Arranca la segunda semana de huelga en una empresa de Vitoria sin haber recibido ninguna novedad por parte de la dirección.
Tal y como explican los propios trabajadores, "no hay ninguna novedad salvo la comunicación de la Agencia Vasca del Agua URA que rechaza reunirse con nosotros e indica que nuestro interlocutor es la UTE. En la huelga del año 2021 sí se reunieron, por lo menos en dos ocasiones".
Esta es la respuesta que ha recibido este lunes 22 de enero la plantilla de Vitoria en huelga desde hace una semana.
Desde que el pasado 15 de enero dieron comienzo a una larga protesta prevista inicialmente para un mes, los trabajadores no han recibido ninguna noticia por parte de la dirección de la UTE Mediterrraneoko Ibaiak 2021, la firma subcontrata de la Agencia Vasca del Agua URA encargada del mantenimiento de los ríos alaveses que desembocan en el Ebro.
La plantilla de 11 operarios denuncian que su "situación es insostenible".
Este miércoles protestarán en la Virgen Blanca
Al mismo tiempo anuncian que la próxima concentración la realizarán el próximo miércoles, 24 de abril, a las 11.00 horas en la Plaza de la Virgen Blanca".
Hablamos de los trabajadores que mantienen uno de los recursos más importantes en Álava.
El pasado 17 de enero varios de los 11 operarios que se encargan de la limpieza y el mantenimiento de los ríos en el territorio ya se manifestaron frente a las oficinas de URA en la capital alavesa, en la calle Portal de Gamarra, para denunciar su precaria situación laboral y la falta de seguridad.
Apenas son una docena de trabajadores los que realizan en Álava uno de los servicios de mantenimiento más necesarios, y durante un mes dejarán de prestar este servicio.
Un trabajo que a la vez es uno de los más invisibles; eso sí, hasta que una inundación o una riada del Zadorra convierte las calles de localidades alavesas en auténticos ríos y provoca el enfado y la desesperación, por ejemplo, de vecinos de Villodas o Trespuentes.
Otra huelga de cinco meses
No es la primera vez que llevan a cabo protestas. Ya en el año 2021 vivieron una situación muy complicada al secundar cinco meses de huelga.
"Nos regimos por el Convenio estatal de Jardinería, una situación absurda porque ni somos jardineros ni realizamos esas tareas. El convenio de aplicación no es el correcto, y además es un pacto de mínimos que provoca que en algunos casos los salarios no superen los 1.500 euros mensuales en Álava. Con lo que la diferencia con los compañeros del resto de Euskadi que trabajan bajo un convenio provincial es abismal, de más de 10.000 euros brutos anuales".
"A la intemperie haga frío o calor"
"Somos una pequeña plantilla que trabaja en el campo, en el entorno rural a la intemperie haga frío o calor, con un sobreesfuerzo y carga de trabajo que cada vez es mayor, y con un incumplimiento por parte de la empresa en temas de seguridad laboral", explica Javier, trabajador y el único delegado sindical por ELA.
Además, recuerda que la plantilla realiza toda su jornada laboral en la calle, sin aseos, en zanjas, ríos, obras, etc.
Obras de construcción que no les corresponden
La plantilla denuncia dos situaciones insostenibles. Por un lado, los 11 trabajadores de Álava (una plantilla muy corta que se ha ido reduciendo con los años) están asumiendo tareas que les marca URA "que se salen y se alejan de sus cometidos habituales" de mantener los ríos y sus márgenes en las mejores condiciones posibles para evitar inundaciones, retirando material que obstaculice el cauce o realizando plantaciones o tala de árboles.
"Estamos asumiendo también algunas obras de construcción y otras labores que antes no realizábamos", señala el portavoz de la plantilla.
Por otro lado, denuncian incumplimientos por parte de la empresa de medidas de seguridad laboral.
"Una trabajadora está de baja porque perdió una falange en un accidente mientras hacíamos una obra en los márgenes del río en Maeztu, y hemos tenido que acudir a la Inspección de Trabajo para denunciar".