Vitoria está dispuesta a arreglar de forma subsidiaria el edificio en ruina de Santo Domingo, 18

A punto de dar carpetazo al año 2023, un incendio sobresaltó al vecindario del Casco Viejo al desatarse en el número 18 de la calle Santo Domingo de Vitoria.

Comenzó en la planta baja de un inmueble ya desalojado hace años por su estado de ruina, pero en el momento del suceso con okupas dentro. El incendio ascendió hasta la tercera planta y se saldó con tres personas afectadas por inhalación de humo. Todo apunta a que fue provocado.

Se trata de un portal al que los Bomberos ya habían acudido en numerosas ocasiones por incidentes y colocado varios candados. Sin embargo, en otras tantas ocasiones, los okupas los habían retirado y vuelto a entrar en las casas. Ante un nuevo requerimiento de los Bomberos, se ha tapiado. 

Ahora, el Ayuntamiento, tras conceder dos meses de plazo a los dueños para que acometan reformas, dice que está dispuesto a arreglarlo de forma subsidiaria.

Santo Domingo, 38

En similar situación, en ruina, está también el número 38 de Santo Domingo. En este caso, los vecinos se han puesto de acuerdo para vender el edificio, con lo que ésta puede ser una vía para encauzar el problema, entiende el Ayuntamiento.

Explica el concejal Pascual Borja que en agosto se pidió a los propietarios tapiar el acceso al portal y arreglar el edificio en ruina. 

La comunidad ha tapiado los accesos y tiene intención de vender el inmueble. “Merece la pena darles un plazo de tiempo porque está vacío y tapiado”, indica.

Caldo de cultivo para los okupas

Para el PP, en cambio, lo que llama la atención es la “pasividad” del Ayuntamiento ante la cantidad de viviendas y palacios en mal estado del Casco Viejo.

Según la portavoz, Ainhoa Domaica, "se los están dejando caer a pedazos" y convirtiendo en caldo de cultivo para los okupas. 

Critica que el Ayuntamiento deja pasar el tiempo, mientras los edificios en mal estado siguen sin reformarse, aunque así lo exija el Consistorio.

Piensa el gobierno municipal que es normal que el Ayuntamiento agote todas las posibilidades antes de ejecutar una obra de forma subsidiaria.