La semana está siendo complicada para los usuarios y usuarias de los autobuses urbanos de Vitoria, y los problemas no parece que se vayan a solucionar para la próxima en este contexto de reestructuración de líneas, movilizaciones de los trabajadores y trabajadoras de Tuvisa y virus invernales. 

El lunes comenzó con una avería en el tranvía a primera hora que coincidió con los paros convocados por la plantilla de Tuvisa.

Sin metro ligero y con menos autobuses, la ciudad pasó horas sin transporte público suficiente para atender la demanda. La situación no mejoró los días posteriores. 

Los buses no cumplen los horarios, las frecuencias han dejado de ser cada diez minutos, como tiene la empresa estipulado para los días laborables, y se acercan más a los veinte minutos de los festivos, incluso a la media hora.

Movilizaciones

18 de diciembre. El comité de empresa ha convocado paros en los autobuses de Tuvisa de cinco a nueve de la mañana, como la semana pasada.


2 jornadas de huelga de 24 horas ha convocado el comité de trabajadores y trabajadoras de Tuvisa para los días 19 y 21 de diciembre, martes y jueves de la próxima semana. El día 21, además, coincide con el Mercado de Navidad que Vitoria celebra cada jueves anterior a Nochebuena en la Plaza Nueva.

Y la próxima semana comenzará con nuevos paros el lunes 18, de cinco a nueve de la mañana, y dos jornadas de huelga las 24 horas del día el martes 19 y jueves 21, si no se desconvocan antes.

De momento, la reunión del jueves entre la empresa y el comité no consiguió desactivar el conflicto. También el lunes 18 habrá nuevas protestas de la plantilla en las calles.

“¿Qué está pasando?”

La situación es generalizada en casi todas las líneas (10, 7, 6, 10, BEI...) y la indignación de los viajeros va en aumento, al igual que los tiempos de espera en las marquesinas. 

Indigna a la población la falta de servicios pero, sobre todo, indigna que los buses no pasen a su hora sin previo aviso.

Basta echar un vistazo a las quejas escritas en el Buzón Ciudadano los últimos días, quejas que los propios conductores, en el marco de sus protestas, animan a la ciudadanía a poner ante el Ayuntamiento, mientras los pasajeros reclaman a Tuvisa que arregle este desaguisado.

Quejas ciudadanas

He aquí solo algunos ejemplos: “Hoy, el autobús de la línea 8, a las 7.45 horas, no ha pasado por la Avenida, hemos estado más de 20 minutos esperando a pesar de que en las pantallas indicaba que llegaba. Hoy no había huelga”.

“Últimamente hay retrasos en el autobús y no aparece el bus de 8.40. Ya sabemos que ha habido huelga, pero los días que no, también faltan autobuses”.

“¿Qué está pasando con los autobuses esta semana? (...) Estoy llegando todos los días tarde a trabajar y tenemos problemas para llegar al colegio puntuales. ¿Es debido a los paros que se anunciaron? Por lo menos, facilítennos información, ya que estamos agobiando a los conductores. Es un desastre de gestión absoluto”.

Esperando al autobús Alex Larretxi

“Todos los días de esta semana, la línea 10 a las 9.20 horas no pasa correctamente”. “La línea 10 no está funcionando tal y como figura en sus frecuencias, no está dando el servicio cada 10 minutos”. “Mesedez, si se quiere fomentar el uso de transporte público, hay que cumplir con los servicios que se ofrecen, de lo contrario, no sirve de nada”.

“Día 14 de diciembre: el autobús de las 6.50 horas no ha aparecido. LLevamos días sin saber qué autobús pasará, cuándo y si se podrá coger o estará lleno y te dejará en tierra”.

“Quiero mostrar mi malestar por la falta de frecuencia y servicio que está prestando Tuvisa en la Green Capital. Un montón de usuarios lo estamos padeciendo en la línea del BEI, esperando más de 15 minutos en la parada, para luego ir en el bus como sardinas en lata. Arreglen este desaguisado, los usuarios somos los más damnificados”.

Empresa y plantilla

“Falta autobuses y conductores”, responden algunos chóferes cuando se les pregunta. “No faltan vehículos, falta personal”, replica Tuvisa.

La sociedad municipal que gestiona el transporte público en Gasteiz argumenta que esta falta de chóferes se debe a que los delegados sindicales se han cogido todas las horas libres que les corresponden “de repente y de forma inusual”. 

Explicación que desmiente el comité mediante una relación de los servicios que diariamente se quedan sin cubrir, “consecuencia de la mala gestión por parte de la dirección de Tuvisa”, señala. 

“Esta falta de personal no es una cuestión generada por el conflicto sino derivada de un problema estructural de falta de personal que la dirección de Tuvisa ha venido solventando gracias a la buena voluntad de los trabajadores y trabajadoras que, en sus días de descanso, salen a trabajar para cubrir estas necesidades que ahora quedan al descubierto”, argumenta.

Últimas inversiones

Esta misma semana, el responsable político de Tuvisa, Iñaki Gurtubai, ha declarado, en cuanto a la plantilla, que hay 313 chóferes, seis más que hace dos años, y que ningún empleo corre peligro.

“Incluso, necesitamos más personal”, reconoce, ya que en momentos puntuales ni las bolsas de empleo son suficientes. “No sobra nadie en Tuvisa”, añade. Valora también el edil las últimas inversiones hechas para comprar nuevos autobuses e implantar el BEI. 

Por su parte, el comité de Tuvisa reivindica en sus protestas evitar la pérdida de autobuses en línea, recuperar los que ya se han perdido desde la pandemia e implementar los que sean necesarios para garantizar un buen servicio.