Tras semanas de cielos encapotados y jornadas bochornosas marcadas por la inestabilidad, los vitorianos han podido hoy disfrutar del primer chapuzón del verano en las piscinas municipales, con 32 grados de máxima y sin además esa amenaza de chubascos vespertinos del último tramo de la primavera.

En definitiva, el sábado ideal con el que muchas personas sueñan para poder disfrutar de su tiempo libre, lo que ha provocado también que centenares de ciudadanos hayan aprovechado ese buen tiempo para coger la toalla, las chanclas, el bañador y la crema solar, con un mismo objetivo: refrescarse en cualquiera de los dos complejos municipales, Mendizorroza o Gamarra, que abrieron la temporada el pasado 26 de mayo.

2.695 bañistas al mediodía

Y como todo en esta vida, ha habido desde usuarios más madrugadores, como los 259 que había en ‘Mendi’ y los 135 de Gamarra, a las 10.28 horas, a otros que han preferido atrasar algo más su visita.

Si bien, al mediodía, cuando el sol más apretaba, ambas instalaciones ya eran un hervidero de gente. Muestra de ello eran las 1.124 personas de ‘Mendi’ a las 12.40 horas o las 1.571 de Gamarra que había también a esa misma hora, según los datos de aforo en tiempo real.

Unas de las que tenían planeado desde la víspera pasar el día en las piscinas de Mendizorroza eran las amigas Uxue Pérez e Irene Durana, ambas de 16 años.

"La entrada de día es cara. Vale 7,30 euros"

“Yo sí que me voy a dar ahora el primer chapuzón del verano, pero Irene se lo dio ayer”, explicaban al poco de entrar en las mismas con un método de acceso diferente en cada caso, ya que mientras Uxue está abonada, Irene se tuvo que sacar la entrada de día, “que es cara, al valer 7,30 euros”, por lo que propone bajar su precio “porque tengo que estar ahorrando para venir”.

Por ello, para amortizar el coste de esta entrada, su plan era pasar todo el día allí, por lo que fueron previsoras a la hora de traerse la comida de casa.

“Nos hemos traído el bocata”, precisaban estas chicas que lo que más les gusta de este sitio son los toboganes y lo que menos, aparte del precio del ticket de día, “que haya más sombrillas y que el agua está muy congelada”.

Otros que también tenían pensado ir a ‘Mendi’ ese día fueron Ane, que también ve necesario más zonas de sombras, su pareja Ander y su hija Malen, de año y medio, que durante esta jornada se ha dado el primer chapuzón de su vida.

En este caso, en la piscina tropical, donde se estrenaban también sus aitas: “Hasta ahora, nunca habíamos estado en ella porque hasta que no hemos tenido a la hija estábamos en el otro lado”, recordaba Ane entre risas, al tiempo que señalaban a la piscina de adultos.

"Teníamos pensado hacer un plan de agua, aunque no sabíamos si ir al pantano o venir aquí"

“Lo teníamos planeado desde ayer porque teníamos pensado hacer un plan de agua, aunque no sabíamos si ir al pantano o venir aquí”, agregaba Ander.

En la tropical

Otros que también estaban en la piscina tropical eran Arantxa, Sergio y su pequeña Mara, de año y medio, que en breve tendrá una hermanita porque su amatxu está de siete meses.

"Es un plan diferente para los niños"

Era también el primer chapuzón del verano para esta familia, que no ha dudo en acudir, “aprovechando el buen tiempo que hacía”, aunque lo han improvisado sobre la marcha.

“Hemos llegado a las 10.45 horas. Es un plan diferente para los niños y que puedan disfrutarlo, pero lo que menos nos gusta es cuando se llenan mucho, aunque ahora, de momento, se está superbien”, resaltaban poco antes del mediodía.

"En esta piscina infantil no hay muchas emergencias sanitarias"

Melisa, en cambio, que también estaba en las piscinas, no lo hacía por ocio, sino para prevenir y evitar males mayores como socorrista que es, desde 2014.

De momento, está todo tranquilo. En esta piscina infantil no hay muchas emergencias sanitarias. Como apenas tiene profundidad, las incidencias que suele haber están relacionadas con resbalones, cortes o heridas”, concretaba.