El 24 de noviembre es una fecha que ya han marcado en rojo muchos trabajadores en Vitoria.

A la mayor factoría de Euskadi le toca renovar el comité de empresa, y serán cerca de 5.000 trabajadores de Mercedes (desde donde cada día salen unas 700 furgonetas ensambladas) los que decidirán a quién le dan la mayoría para presidir este órgano de representación de la plantilla , con 29 delegados en juego.

Una votación que no está exenta de polémica, como los últimos acontecimientos ocurridos en la fábrica que han dejado dos claros frentes sindicales abiertos y una plantilla dividida: nueve jornadas de huelga sin que saliera ni una furgoneta de la planta por la participación masiva de los trabajadores, y finalmente la renovación del convenio que aprobaron el 57% de los operarios, con vigencia a seis años (hasta 2026) y sin el incremento salarial del IPC.

Por un lado, CCOO, UGT, Ekintza y PIM, que conforman actualmente la mayoría del comité con 17 delegados, respaldaron el convenio, frente a ELA, LAB y ESK (con 14 representantes) que dijeron no al nuevo pacto por no garantizar la subida del IPC en los sueldos.

Manifestacion de trabajadores de Mercedes Alex Larretxi

Últimas elecciones en 2018: UGT más votos, ELA presidencia

Los trabajadores tendrán que decidir el próximo 24 de noviembre un total de 29 delegados sindicales, dos menos que las pasadas elecciones al haber bajado la plantilla de 5.000 operarios.

Actualmente, los 31 representantes se dividen así:

  • UGT - 7
  • ELA - 7
  • CCOO - 4
  • LAB - 4
  • Ekintza - 3
  • PIM - 3
  • ESK - 3

Lo que sucedió en el año 2018 fue que UGT y ELA fueron las centrales más votadas en las elecciones sindicales celebradas en noviembre al conseguir siete representantes cada una de los 31 que integraban el comité (UGT ganó en votos al lograr 933 apoyos, y ELA se llevó 853 papeletas).

De este modo, UGT redujo su representación al pasar de 9 a 7 delegados, mientras que ELA subió de 5 a 7 portavoces.

Finalmente, fue el representante de ELA Igor Guevara quien se alzó con la presidencia del comité (repitiendo en el cargo) al recibir el apoyo de ELA, LAB y ESK, y la abstención de CCOO.

Polémica por el voto telemático

Apenas falta un mes para esta importante cita en las urnas, un proceso que ya ha provocado las primeras reticencias.

Tal y como explican desde ELA, LAB y ESK, tanto la propia empresa como los sindicatos UGT, CCOO, Ekintza y PIM pretenden que el voto electrónico sea una opción más para elegir a la representación del comité.

Sin embargo, ELA, LAB y ESK rechazan esta fórmula de la que desconfían al "no contar con garantías suficientes". Este método ya se utilizó en el último referéndum para votar la renovación del convenio.

Las tres centrales consideran que "hoy en día no existen garantías suficientes para llevar adelante esa forma de votar, no hay legislación al respecto, no existe una forma ni homologada, ni certificada por ninguna institución, ni estandarizada para votar electrónicamente; cada empresa tiene una forma diferente de desarrollar el proceso de voto electrónico, y las formas de unas empresas ponen en cuestión los métodos de otras".

Estas centrales van más allá en su argumentación. "No entendemos que Mercedes esté dispuesta a pagar unos 14.000 euros por incluir el voto electrónico cuando la participación presencial, elección tras elección, supera el 92% de dicha participación".

A pesar de que la Mesa ya ha aceptado el voto electrónico, hay que esperar la decisión del árbitro.

"Si finalmente existe esa opción, desde ELA, LAB y ESK entendemos que el voto presencial y por correo es el único que puede garantizar nuestro voto. Por ello, hemos pedido a la plantilla que ejerza su derecho a voto de manera presencial o a través del voto por correo".