El fenómeno de los apartamentos turísticos u ocasionales está viviendo un desarrollo nunca antes visto en la capital alavesa. Marta Barcina es la responsable del apartahotel Eire que abrió sus puertas en marzo de este mismo año.

Acaba de inaugurarse el tercer apartahotel en Vitoria en los últimos dos años y para otoño está previsto que se abra el cuarto. ¿A qué se debe este ‘boom’ de apartamentos que experimenta la capital alavesa?

La creación de apartahoteles nace de la brutal necesidad de vivienda en Vitoria. En nuestro caso, no respondemos al concepto de hotel al uso, sino al alquiler de una vivienda habitual. Al principio, si que pensamos dedicarnos al sector turístico, pero los primeros clientes que tuvimos fueron personas de la propia Vitoria que hacían obras en casa. No damos servicio a la demanda turística, sino a medias estancias.

Entonces, aunque les cuenten como recurso turístico, ¿no están dirigidos a ese uso?

Mira, de nuestros clientes, el 75% son personas que requieren de una media y larga estancia en la ciudad y el 25% restante son huéspedes, vecinos de Vitoria, que se hospedan unos meses porque están haciendo obras o reformas en sus hogares. Vimos que había un nicho de mercado muy importante con los trabajadores temporales que vienen de fuera a la ciudad, así como con estudiantes o personas que necesitan alojarse por un tiempo en Gasteiz. Ese es nuestro enfoque, pero cada proyecto tiene uno diferente. Creo que en el Kora hay más estudiantes porque está cerca de las Universidades, el Líbere se dedica mayormente al turismo y los de Salburua están más relacionados con los deportes y los deportistas.

¿Cuál sería su perfil tipo?

La mayor parte es gente que vive sola. Divorciados o solteros que no necesitan de un piso de 80 metros cuadrados ni de tres habitaciones para vivir. Principalmente, son trabajadores de larga y media estancia que vienen unos meses a Vitoria por motivo de trabajo. Funcionarios del juzgado o Correos, trabajadores de Mercedes, del Deportivo Alavés o estudiantes en su último año de carrera. La gente cada vez se mueve más por motivos laborales y respondemos a esa nueva realidad.

La expansión de apartahoteles en Vitoria se ha producido tras la irrupción de la pandemia. ¿Tiene el coronavirus algo que ver? ¿Ha cambiado los hábitos de viajar?

Yo creo que la pandemia no ha afectado a este desarrollo. Es la enorme necesidad de vivienda que hay en Vitoria y el alto precio de los alquileres. Hay trabajadores temporales que tienen dificultad para encontrar un alquiler por cinco meses. Además, alquilando un apartamento te ahorras gestiones, como dar de alta los suministros, y en el precio mensual te entran todos los gastos de energía e internet. Tampoco necesitas de avales bancarios ni firmar un contrato indefinido. Al final, a una pareja o una persona individual le sale más económico alquilar un apartahotel.

Los apartahoteles suponen ya más del 40% de la oferta turística de la ciudad.

Puede ser, pero realmente no sabemos qué porcentaje se dedica a la estancia turística. En nuestro caso se utiliza como vivienda habitual.

En la actualidad sobrepasamos las 3.500 plazas hoteleras, ¿ya hay demanda para tanta oferta?

Siendo sincera es un tema que no sé valorarlo en profundidad. Este año se ha visto un incremento de visitantes, pero al final vienen una o dos noches como mucho. Tampoco ayuda que en agosto esté media ciudad cerrada ni que en invierno haga frío y no salgamos a la calle.

¿Hacen falta programar más eventos?

Realmente no sé si hacen falta más eventos. Vitoria es una ciudad que gusta mogollón al visitante, pero que no la sabemos vender. Más que nuevos eventos, igual habría que hacer más cosas de forma grupal. Por ejemplo, dentro del sector hostelero hacer campañas de bebida más pintxo. No sé, como te digo, no somos hoteleros, sino apartamentos de viviendas.

Con la actual competencia, ¿tiene viabilidad de cara al futuro?

Francamente sí (sonríe y afirma con la cabeza). Empezamos en marzo y hemos estado completos hasta agosto. La verdad es que siempre ha estado alquilado. Tenemos 20 habitaciones con capacidad para 40 personas y el grado de ocupación ha sido del 95%. Ahora tenemos una libre y ya hemos recibido tres llamadas para medias estancias de tres meses. Se va un huésped y seguido viene otro.

Visto su buen funcionamiento, ¿están pensando en abrir otro?

Sí, lo tenemos en mente. Será cerca de este, pero en un edificio nuevo de la Avenida Gasteiz. La previsión es contar con otros 13 apartamentos con capacidad para 26 personas e iniciar las obras a principios del próximo año.