El control de maduración de la uva llevado a cabo por el Consejo Regulador de la DOCa Rioja constata la correcta evolución de la maduración, si bien puntualiza una ligera moderación en la velocidad del proceso.

El tercer boletín de maduración hace referencia a la Zona de Rioja Oriental y comienza también el seguimiento de la zona media de la Denominación. Según el Consejo Regulador, tanto Rioja Alta como Rioja Alavesa “muestran valores iniciales correctos”. Además, se confirma para la zona de Rioja Oriental que el adelanto en las variedades Garnacha y Graciano es más reducido que en la variedad Tempranillo, situándose en una semana aproximadamente. Por su parte, en la zona centro de Rioja Alavesa y Rioja Alta, el adelanto no es tan acusado; los primeros datos hablan de un adelanto de entre siete y cinco días en ambos casos, si se compara con la campaña del año anterior.

El Consejo Regulador observa en Rioja Oriental que “las variedades blancas precoces están en situación de vendimia y, algunas parcelas de Tempranillo, aproximándose a vendimia”. Desde el Órgano de Control subrayan la recomendación de prestar especial atención a la evolución de la acidez y pH y recalcan que las condiciones vegetativas y sanitarias de la vid son muy buenas.

Caída

Por su parte, el consejo sectorial vitivinícola de Cooperativas Agro-alimentarias de España espera una caída del 9,08 % en la producción de la vendimia de este año, hasta los 36.291.600 hectolitros, pero con una uva buena calidad y sin enfermedades y en Euskadi se esperan 650.000 hectolitros.

Así lo ha informado la organización este viernes en un comunicado en el que ha indicado que la previsión se ha realizado teniendo en cuenta la climatología actual, con ausencia de precipitaciones, pero que las cifras podrían incrementarse en caso de registrarse lluvias en septiembre. La cosecha prevista es un 13,57 % inferior a la media de los últimos cinco años, que se situó en 41.991.985 hectolitros. Tan sólo se prevé un aumento en la producción de este año en Asturias, de apenas 54 hectolitros más, Extremadura (+420.000) y Navarra (+530.000).

“En invierno y al principio de primavera hubo una disponibilidad de agua que ha sido clave para el buen desarrollo vegetativo que presenta hoy el viñedo, pero debido al excesivo calor de los últimos meses y el consiguiente estrés hídrico que ha sufrido el viñedo, la uva tiene menor peso que en años anteriores”, ha explicado Cooperativas.

La organización ha destacado que la de este año “es una de las vendimias más tempranas que se recuerdan, con adelantos de dos y tres semanas”, y que los viñedos están sufriendo mucha sequía.

“Actualmente el agua embalsada en España es de sólo el 36,88 %, cuando la media de los últimos 10 años, en estas mismas fechas, era de 55,57 %”, ha expresado. Cooperativas ha indicado que el 2022 “ha sido un año difícil tanto para viticultores como bodegas”, debido al incremento de los precios del transporte, vidrio, cartón, electricidad, combustibles y otros insumos necesarios para producir. Ha indicado que, dado que la uva viene con una alta calidad, esperan que esto sirva para incrementar cuota de valor del vino español en los mercados internacionales.