¿Qué supone para ETS el Premio +Impacto que le concede DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA?
–Es un reconocimiento a una trayectoria marcada por un trabajo constante. Nosotros hemos sido de crecer poco a poco, con un estilo de música vinculado a la calle y al estilo floclórico, que no son de los más premiados, y después de dieciocho años hemos podido demostrar que nuestra música tiene un impacto positivo en la gente. Es algo que nos llena muchísimo.
Cuando se pone en marcha un grupo de música todo el mundo sueña con llegar a lo más alto, pero raramente se piensa que eso se vaya a conseguir.
–Muchas veces hemos soñado, pero sin hacernos ilusiones utópicas. Hemos intentado ser muy realistas de dónde estábamos e ir avanzando poco a poco, con trabajo constante. ETS se formó en Yécora, que es un pueblo pequeño de Rioja Alavesa, y sus componentes no teníamos ningún conocimiento previo a nivel musical. Haber llegado al punto que estamos nos hace muchísima ilusión porque hemos creado un camino propio desde cero y eso tiene un valor especial.
“El Premio +Impacto es un reconocimiento a 18 años de una trayectoria marcada por un trabajo constante”
Han sido un grupo de explosión tardía.
–Salir de la zona de confort ayuda; suena a tópico, pero en nuestro caso ha sido así. Tras catorce o quince años, sentíamos que teníamos que cambiar y adaptarnos a la sociedad actual y a nuestros propios gustos, que también han ido evolucionando. Decidimos dejar un poco a un lado la trayectoria musical y estética que habíamos estado trabajando para buscar nuevos horizontes y nuevos estilos, también trabajando con profesionales, el tema de la imagen... Desde el momento en el que decidimos profesionalizar el grupo, hemos invertido más recursos humanos y materiales a enriquecer el proyecto y eso ha dado sus frutos.
Uno de esos cambios relevantes fue el paso a cantar en euskera.
–Es importante recalcar que venimos de Rioja Alavesa y que ha habido un proceso de euskaldunización con componentes del grupo que viven en La Rioja. Con la marca de ETS llevamos la identidad del territorio y esa es una de las claves. La apuesta por el euskera ha sido clave para mostrar a la sociedad que es posible apoyar a lenguas minoritarias. Es interesante diferenciarte del resto y teníamos claro que, si queríamos destacar dentro de un mundo globalizado, la identidad y el territorio eran claves. Y siendo un grupo alavés, tenía toda la coherencia usar nuestra lengua.
“La apuesta que hicimos por el euskera ha sido clave para seguir llevando con nosotros la identidad del territorio”
Cuando les dicen que son el grupo en euskera más escuchado...
–Todavía nos lo estamos creyendo. Año tras año vemos ese apoyo en las plazas de los pueblos y es algo que tenemos que disfrutar. Pero, más allá de los números, lo notas en la calle, por cómo te ven, cómo recibes esos mensajes de agradecimiento o cómo les está ayudando nuestra música para afrontar los días. Me quedo con eso, aunque los números se reflejan en conciertos multitudinarios que también nos dan felicidad porque no hay que olvidar que hacemos música para la gente.
De las fiestas de los pueblos a los grandes escenarios.
–Como músicos, nos gustan los conciertos de grandes recursos y gran impacto social, pero no olvidamos de dónde venimos. En la industria musical hay cierta reticencia a valorar los grupos que han crecido en las fiestas de los pueblos. Quizá no tiene tanto glamur decir eso como que llenas salas o festivales, pero nosotros tenemos claro que venimos de Yécora, somos un grupo que ha crecido en las fiestas de los pueblos e, independientemente del tipo de concierto hacia el que vayamos a ir en el futuro, intentaremos ser fieles a nuestra marca y a nuestra historia.
¿Cómo ha sido 2023 para ETS?
–Ha sido intensidad y aprendizaje. El resultado de 18 años de trabajo, el año de reconocimiento del grupo, de haber recogido lo que habíamos plantado. ETS ha impactado a nivel masivo en una sociedad que sentimos nuestra. Ha sido el año con más conciertos, con más público, con más trabajo, pero también con más estrés y responsabilidad. El concierto en Fiestas de Vitoria supuso la punta del iceberg porque había una expectación enorme. Era la tercera vez en Los Fueros, pero este año ha sido diferente. Luego nos llegó que la asistencia había sido masiva, que no se podía pasar por las calles, que hubo gente que no pudo ni ir... Nos asusta un poco en qué nos hemos convertido.
“Celebraremos nuestro veinte aniversario y la fiesta de fin de gira en marzo de 2025 en el BEC; más allá hay un horizonte vacío”
El reconocimiento se ha extendido ya más allá de Euskal Herria.
–Hemos comenzado a salpicar hacia afuera, pero si no hubiésemos apostado por lo de aquí seguramente ahora el grupo no estaría vivo y nadie nos haría caso. Hay que trabajar las cosas pequeñas, lo local, y apostar por un idioma que está en crecimiento ha sido clave como factor diferenciador.
¿Qué viene en el futuro de ETS?
–Celebrar nuestro veinte aniversario y la fiesta de fin de gira en marzo de 2025 en el BEC y llevar ahí nuestra identidad de las fiestas de los pueblos, recreando un día festivo para homenajearnos a nosotros mismos. Más allá de esto hay un horizonte vacío. Sabemos que el 22 de marzo de 2025 vamos a parar durante un tiempo indefinido. No sabemos qué llegará después. Tenemos un año de preparación de ese día, que es la mayor apuesta que se puede hacer en Euskal Herria y queremos que sea un día festivo de jornada completa, de la mañana a la noche con actividades para toda la familia y el colofón del mayor concierto que hayamos tocado. El día más importante de nuestra historia.
