PAMPLONA. "De no tomarse medidas 4.000 puestos de trabajo directos y alrededor de 3.000 indirectos en Navarra van a desaparecer en los próximos meses", ha afirmado en declaraciones a los periodistas el presidente de EHNE, Fermín Irigarai.
Varios tractores, con carteles en los que se leía "Precios dignos", "Control producción" o "Preservar el medio ambiente", han abierto la marcha que se desarrollado bajo el lema "Crisis ganadera, gobierno solució".
El objeto de esta protesta que, según sus organizadores, ha congregado a más de un millar de personas es denunciar "la grave situación que está atravesando el sector y que viene alargándose nueve meses con una falta total de respuesta por parte del Gobierno de Navarra que impide que esto tenga una salida".
Al mismo tiempo los ganaderos se han movilizado en defensa de sus puestos de trabajo, ya que "en un momento en el que todo el mundo hace tanta referencia a la creación de puestos de trabajo" ellos salen a la calle porque tienen "puestos de trabajo, pero en peligro".
Por eso Irigarai ha insistido en que es "urgente" que el Gobierno foral y el resto de administraciones adopten "medidas que corrijan los motivos que han llevado a esta situación" y en este sentido ha apuntado que "hay que controlar los mercados", puesto que "no se puede estar al albur de los intereses de los grandes especuladores", ya que se está hablando de "alimentación, no de tornillos".
Esto exige un compromiso por parte de "todos", también de los ganaderos que, según ha asegurado, se comprometen a "trabajar por la calidad, por el precio de los productos que va a demandar el consumidor y por algo primordial: el mantenimiento del medioambiente en las zonas rurales de Navarra y de la economía y el sistema social en esas zonas tan sensibles en estos momentos al despoblamiento o el abandono".
Irigari ha concluido subrayando su apuesta por "seguir trabajando por este sector, seguir produciendo alimentos de calidad en cantidad suficiente y a precio asequible para el consumidor".