El sindicato LAB ha reclamado al nuevo Gobierno vasco la constitución de una mesa negociadora específica, al margen de la Mesa de Diálogo Social, para acordar un salario mínimo en Euskadi, que, según los cálculos actualizados por la central, tendría que situarse en 1.600 euros.

La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, ha explicado este lunes en Bilbao las reivindicaciones que el sindicato formulará en las rondas de contactos anunciadas por el lehendakari, Imanol Pradales, y el consejero de Empleo, Mikel Torres.

Aunque aún no han sido convocados oficialmente, en LAB ya han elaborado la lista de demandas a plantear, que pasa por la adopción de medidas para mejorar los salarios, actualizándolos por encima del IPC; reforzar los servicios públicos y promover una reconversión industrial que afronte los retos ecosociales y no esté liderada por las empresas.

LAB ha analizado el programa del PNV y PSE para la conformación del Gobierno Vasco y la conclusión, según Aranburu, es que "no se corresponde con la imagen de cambio" que quiere dar el nuevo Ejecutivo ya que se aprecia "continuidad". Para la sindicalista, que se "ensalce" la gestión del último Gobierno vasco "no es un buen punto de partida".

Más impuestos para las empresas y subir el salario de funcionarios

Ante el nuevo Ejecutivo, LAB defenderá que los empresarios "paguen más" y pedirá que la Administración "predique con el ejemplo" mejorando los salarios de los empleados públicos y las condiciones de los trabajadores de las subcontratas.

SMI vasco

Reclamará, además, un Salario Mínimo Interprofesional (SMI) acorde con la realidad socioeconómica de Euskadi.

LAB ha venido reclamando un salario mínimo de 1.400 euros atendiendo a la recomendación de la Carta Social Europea de que sea equivalente al 60 % del salario medio territorial, pero ha elevado la reivindicación hasta los 1.600 euros ya que, según sus cálculos, esta es la cantidad actualizada resultante de los últimos datos estadísticos de estructura salarial (correspondientes a 2022).

Aranburu ha valorado que el acuerdo de gobierno entre PNV y PSE incluye "la necesidad de un salario mínimo acorde con la realidad del territorio", lo que ha considerado "fruto de la lucha de los trabajadores", pero ha denunciado que este asunto pueda ser tratado en la Mesa de Diálogo Social que comparten el Gobierno vasco, la patronal Confebask y los sindicatos CCOO y UGT y en la que ELA y LAB no participan por decisión propia.

Fuera de la mesa de diálogo social

La dirigente sindical, que ha reiterado que LAB no participará en ese foro por considerar que su objetivo es "legitimar las políticas patronales y gubernamentales", ha pedido una mesa específica para acordar un salario mínimo en Euskadi, en aplicación del artículo 83 del Estatuto de los Trabajadores, que contempla la posibilidad de que sindicatos y empresarios puedan elaborar acuerdos sobre materias concretas.

Para Aranburu, alcanzar un acuerdo de esas características es una cuestión de voluntad, aunque no ve esa voluntad en Confebask, por lo que ha instado al Gobierno vasco a ser "agente activo" para interpelar a la patronal, de manera que se pueda impulsar la negociación.

La sindicalista ha afirmado también que para "blindar" y dotar de garantía jurídica un eventual acuerdo vasco en esta materia habría que modificar el Estatuto de los Trabajadores y ha asegurado que LAB ya "ha trabajado" el asunto con los partidos vascos y el Ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz.

En la ronda de contactos con el nuevo Gobierno vasco, el sindicato abertzale también demandará, entre otras cosas, un cambio de rumbo de las políticas "neoliberales y clientelares" en Osakidetza y abogará por un nuevo marco jurídico político que asegure mayores cotas de soberanía para Euskadi.