El fabricante de neumáticos Michelin está diversificando su negocio tradicional de fabricación y venta de neumáticos, de forma que prevé que en 2030 el 30% de sus ingresos proceda de otras áreas de negocio, según han confirmado este martes desde la filial española de la compañía.

En un encuentro con prensa, Mónica Rius, directora de Comunicación de Michelin en España y Portugal, señaló que la intención corporativa es que dentro de siete años el negocio de neumáticos acapare 'solo' el 70% de su facturación anual, mientras que el 30% restante vendrá de actividades "alrededor del neumático".

En esta línea, afirmó que desde la compañía se está trabajando para reforzar su posición en nuevas áreas de negocio, aplicando su experiencia como "experto en materiales de alta tecnología" y que hasta la fecha solo se destinaban a la fabricación de neumáticos. Así, citó el sector médico o el de transporte marítimo como algunos en los que se ha introducido recientemente.

Por otro lado, Rius destacó también que la compañía francesa está comprometida con la reducción del impacto medioambiental de sus actividades y de sus productos. Así, recordó que el objetivo de la empresa es que el 40% de los materiales de sus neumáticos sea sostenible para el ejercicio 2030, mientras que para 2050 el 100% de los materiales utilizados será reciclado, reutilizado o sostenible.

La directiva apuntó que Michelin cuenta con presencia en la actualidad en los cinco continentes y tiene una plantilla mundial formada por alrededor de 125.000 trabajadores y con una inversión anual de unos 700 millones de euros en materia de Investigación y Desarrollo.

En España, la empresa registra una facturación anual de unos 3.000 millones de euros, con una plantilla de unas 7.500 personas en cuatro centros de fabricación (Lasarte, Vitoria, Valladolid y Aranda de Duero), un centro de I+D (Almería) y en las oficinas centrales.

Desde Michelin destacaron que las cuatro factorías nacionales fabrican anualmente 400.000 toneladas al año de neumáticos, por lo que convierte a España en el segundo país por volumen de producción en todo el mundo y el primero en Europa, por delante incluso de Francia, sede mundial de la compañía. "Ponemos en valor el 'made in Spain'", afirmó Rius.

De cara al año que acaba de comenzar, resaltó que la empresa se concentrará en las áreas de sostenibilidad, tanto interna como externa, así como en la electrificación, a raíz del impacto diferente que tiene el vehículo eléctrico sobre el neumático en comparación con los modelos de combustión. Otro tema en el que trabajará este año será en la confianza, para poner en valor que un producto Michelin mantiene el mismo rendimiento siendo nuevo o al final de su vida útil.

"Queremos que la gente valore la importancia de elegir un neumático bueno, respetuoso con el planeta, seguro y que aumente la autonomía del vehículo", subrayó la directora de Comunicación de Michelin en España y Portugal.