- El lehendakari, Iñigo Urkullu, recordó ayer que, cuando los empresarios vascos aplauden el modelo de baja presión fiscal del Gobierno de Madrid, lo hacen “desde sus propios intereses”, mientras que él ha de atender a los intereses del “conjunto de la ciudadanía”, por lo que reiteró que su modelo no es el de la política “neoliberal” del PP, sino el de los países europeos “más avanzados”.

Urkullu, que respondió a una pregunta de PP+Cs acerca de la fiscalidad en el pleno de control del Parlamento Vasco, lamentó, además, las críticas recibidas tras haber acusado, el pasado día 5, al Gobierno de la Comunidad de Madrid de practicar “estrategias de dumping fiscal”. El lehendakari recordó que él “no ha sido el primero” en usar esta expresión para referirse al modelo tributario practicado por un determinado gobierno autonómico. En su respuesta al presidente del grupo PP+Cs, Carlos Iturgaiz, le recomendó que “repase la hemeroteca” para recordar las “acusaciones” y denuncias judiciales que otras comunidades autónomas presentaron en su día contra las instituciones vascas por programas de incentivos tributarios como las denominadas vacaciones fiscales o las ayudas a los astilleros.

Además, destacó que él en ningún momento recurrió a las “descalificaciones”, como las que, en referencia a Díaz Ayuso y otros dirigentes autonómicos, han dirigido “presidentes de otras comunidades autónomas, especialmente Madrid”, los cuales -según recordó- han calificado el Concierto Económico de Euskadi de “privilegio” e instrumento “insolidario”.

Urkullu sostuvo que el Concierto -la norma que regula las relaciones tributarias y financieras entre el Estado y el País Vasco- es un instrumento que dota a las instituciones de Euskadi de amplias competencias en materia tributaria, lo que supone un ejercicio de “riesgo unilateral”, ya que la comunidad autónoma depende de los ingresos que genera su propia economía.